LLAMADO
FILIPENSES 2:5-9 Compórtense como lo hizo Cristo Jesús, el cual, siendo de condición Divina no quiso hacer de ello ostentación, sino que se despojó de Su grandeza, asumió la condición de siervo y se hizo semejante a los humanos. Y asumida la condición humana, se rebajó a Sí mismo hasta morir por obediencia, y morir en una cruz. Por eso, Dios lo exaltó sobremanera y le otorgó el más Excelso de los Nombres. (B.L.P.H.)
© El llamado a servir y la motivación correcta para hacerlo.
Cuando se trata de servir en la iglesia, las personas rara vez piden cargos donde pasarán desapercibidos. Generalmente piden que los involucren en posiciones de liderazgo. No hay nada malo en ser director de un equipo de trabajo, pero Dios nos llama a tener el corazón de siervo:
© Desea que nuestra motivación sea glorificarlo a Él, no a nosotros mismos.
A través de los años, he tenido muchas conversaciones con jóvenes cristianos. Innumerables veces me han expresado el deseo de estar al frente de un ministerio reconocido e importante, y quienes son llamados por una congregación pequeña luchan con frecuencia con el sentimiento de que no son importantes.
Así que les recuerdo que en Su gran amor, Dios nos coloca donde Él quiere que sirvamos, y en cada tarea que realicemos debemos darnos por completo, ya sea una sola persona o una multitud la que nos escuche. En última instancia servimos a Jesús, y a Él no le preocupa el reconocimiento que recibamos, Él desea nuestra obediencia y nuestros mejores esfuerzos.
Son muchas las razones por las que el Señor nos llama a servir:
1. Nos libera de la soberbia y la egolatría, permitiéndonos enfocarnos en Él.
2. Proclamamos nuestro amor a Cristo, por medio de nuestro interés por los demás.
3. Dios prueba y purifica nuestros corazones por medio del servicio.
© ¿Cómo define usted el éxito?
Una respuesta común es: "El logro de objetivos predeterminados".
Pero la definición de la Biblia es diferente…
CONFESIÓN DE FE:
ESTOY COMPLETAMENTE CONVENCIDO QUE TENDRÉ ÉXITO CUANDO DESCUBRA EL PLAN DEL SEÑOR, LE OBEDEZCA Y LLEGUE A SER TODO LO QUE ÉL SE HA PROPUESTO QUE YO SEA.
ORACIÓN:
Señor Jesús, Yahweh Elohim, Señor Dios (Génesis 2:4). Dios mío, Adonai, Señor de señores y Rey de reyes, vengo con un corazón humilde a expresarte la inmensa gratitud que tengo contigo por el llamado que me has hecho y la capacitación que me has dado para ejercerlo con denuedo, integridad, responsabilidad y amor; solo quiero disponerme hoy para ocupar el lugar que Tu determines para mí en Tu reino, de manera que mi servicio se vea libre de egoísmo y vanidad, y se haga supremamente efectivo para mis semejantes. Gracias Dios Todopoderoso por hacer de mi uno de tus llamados. Amén.
Juan Manuel Lamus O.
