viernes, 25 de diciembre de 2015

***SALUDO EN NAVIDAD***

 

A todos nuestros familiares, discípulos y amigos:

©  Esta época  tradicional nos estimula el alma, pues nos llena de nostalgia, vienen a nuestra mente miles de recuerdos, gratos y a veces tristes, las calles se llenan de color y luz, aumenta el deseo de compartir, de dar, de recibir.

 

©  Nuestras casas se visten de fiesta,  ahora con más antelación pues existe la necesidad de  aumentar el gozo en nuestras vidas, los niños  se llenan de ilusiones por aquel regalo especial  que van a recibir  esta noche  o quizás mañana al despertar.

 

© Hay  toda una aventura en  las tiendas, deseando tener más para dar más, el egoísmo disminuye notablemente, pensamos en aquellos que tienen menos, soñamos con el momento  especial para compartir, el momento en que toda la familia se reúne al rededor de un pesebre tradicional o un arbolito cargado de regalos, algunos quieren cantarle al Niño que ya nació, otros al Hombre  que ya murió y resucito, el que nos salvo, pero todo en familia.

 

©  Comenzamos a extrañar a los familiares que viven  en otras ciudades o países, quisiéramos estar a su lado, abrazarlos así como aquellos amigos  que en las buenas y malas nos han acompañado, de cerca o de lejos.

 

©  Algunas lágrimas van a rodar al  recordar a los que están en la morada eterna  y se extrañan más aun en este tiempo de unidad, pero  llega esa paz de Dios y se  comienza a incrementar  por  esa esperanza de un futuro reencuentro.

 

©  Surge en cada uno de nosotros un sentimiento tan inmenso, tan alto  de hermandad, que quisiéramos decirle a todo el mundo que lo amamos, mutuamente nos deseamos  todo lo mejor en este día  y para el año que vendrá a todo aquel que se atraviese en el camino, el panadero, el taxista, el jardinero, al portero, al empresario, al oficial, al mendigo y  al vecino.

 

©  Hasta el perdón aflora, aunque a veces no aflore  el valor algunos quieren reconciliarse con personas que en el camino se apartaron, oramos y clamamos a Dios por los damnificados del invierno o la sequia, y por aquellos que no tienen  los medios para celebrar.

 

©  Este sentimiento aparece tan solo en esta época y lo llamamos el Espíritu de la Navidad, pero la verdad es que el siempre ha estado  allí, porque Dios derramó todo Su Amor en nosotros para que viviéramos  siempre así.

 

©  Solo recordar hoy el nacimiento de Jesús en el pesebre hace que ese amor florezca grandemente, pero eso es  tan solo una aproximación de lo que siempre ha estado destinado para todos nosotros.

 

© Debemos regarlo cada día para mantener ese gozo tan anhelado de Dios en plenitud, y de  forma permanente, porque ese espíritu es El  Espíritu Santo que habita en cada uno de los que hemos creído en el corazón que Jesús es el Hijo de Dios  y lo hemos dicho sin dudar.

 

©  Ustedes son los que día en día nos ayudan a caminar en amor, gracias a todos por ser  la razón  para mantener a Jesús  presente los 365 días del año. Por regar nuestros corazones, por estimular no solo nuestra  alma sino también nuestro  espíritu.

 

***Feliz Navidad, les amamos y les bendecimos***

Juan Manuel, Jeannette y Paula - Diciembre 25 de 2015


Juan Manuel Lamus O.