martes, 24 de noviembre de 2020

APROVECHA

 

EFESIOS 5:15-17 Por tanto, tengan cuidado cómo andan; no como insensatos sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Así pues, no sean necios, sino entiendan cuál es la voluntad del Señor. (NBLA)

 

La vida es el tiempo, pues el tiempo es lo único que verdaderamente nos pertenece, por lo cual debemos ser sabios en su administración, aprovechándolo bien.

 

Hoy he estado pensando en el tiempo.  Cuando estaba trabajando dije: cuánto necesito de más tiempo, pero lamentablemente tengo solo 24 horas al día.  He estado pensado que la gente más ocupada pareciera que tuvieran más tiempo que los menos ocupados.  La gente con menos compromisos y responsabilidades en la vida parece que nunca tienen tiempo suficiente. 

¿Por qué es así?

Hoy entiendo que mi responsabilidad es administrar bien mi tiempo, muchas veces lo he derrochado en las cosas menos importantes.  He notado que la gente ocupada tiende a organizar sus vidas a fin de aprovechar cada minuto que tienen disponible.  Muchos de ellos se desenvuelven en intrincadas organizaciones cívicas y empresariales, y además tienen tiempo para sus familias, para recreación y lo más importante, aún tienen tiempo especial y de calidad para Dios.

 

El pasaje bíblico que estudiamos hoy declara que nosotros como cristianos tenemos que aprovechar bien el tiempo "porque estamos viviendo días muy malos".  Una persona que ha aprendido a aprovechar cada minuto del día ha aprendido a emplear la sabiduría de Dios.  Sé que hoy debo emplear el tiempo suficiente como una oportunidad para servir a Dios y cumplir sus preceptos en mi vida. He descubierto que en verdad se me ha dado tiempo para todo y, sobre todo, para lo que es más útil y provechoso.  Cuando mi mente no está enfocada en las cosas del Señor, la Palabra de Dios y en la oración, entonces siento que mi vida parece un pequeño barco dando vueltas en medio de un lago.  La manera como nosotros invertimos nuestro tiempo es un indicativo de la clase de calidad de nuestro caminar con el Señor. Hay muchos ladrones de tiempo que nos roban horas preciosas que podrían usarse para cosas productivas y significativas de la vida.  Por ejemplo, la televisión, es un gran ladrón de tiempo, nos seca el alma y nos resta productividad, qué buena idea sería agregar a la familia las horas que se gastan ante ella.  Otros ladrones de tiempo son nuestras aflicciones, aún el trabajo, nuestras relaciones y el dejar para más tarde lo que se podría hacer hoy.

Ahora puedo entender que tengo exactamente la misma cantidad de tiempo que todas las personas tienen.

 

El tiempo es un regalo de Dios, y el Señor nos ha asignado una medida de este

en el cual vivir y cumplir sus propósitos. Solo tenemos dos opciones:

¡¡¡Gastarlo temporalmente en nuestros propios intereses,

o Invertirlo para la eternidad!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

EN VEZ DE ANHELAR TENER MÁS TIEMPO, HOY DECIDO APROVECHAR LAS HORAS QUE TENGO Y ORGANIZAR MI VIDA DE TAL MANERA QUE PUEDA HACER LA MEJOR INVERSIÓN DEL TIEMPO, TANTO PARA MI VIDA COMO PARA EL REINO DE DIOS.

 

ORACIÓN:

Padre celestial, El Olam, Dios de la Eternidad (Génesis 21:33). Mi amado Señor Jesucristo, Dios Todopoderoso y Eterno eres Tú, has hecho el tiempo, la eternidad y el universo, y no tienes ni principio ni fin, eres el Alfa y la Omega. Es por eso mi Señor Jesús, que hoy vengo a darte gracias por cada año, mes, día, hora, minuto y segundo de tiempo que me das, y entiendo que de una forma u otra es lo único que realmente es mío, por eso estoy decidido a hacer lo mejor con el, invertirlo de manera inteligente y productiva, ponerlo al servicio de mi familia y de tantas personas que necesitan conocer de Ti, y también aprender a aprovechar efectivamente el tiempo que les das, y llevarlos al entendimiento de que definitivamente es lo único que es suyo. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!

Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri