martes, 16 de diciembre de 2014

GRACIAS DIOS

 

GRACIAS DIOS

 

1 CRONICAS 29:10-14  Luego David alabó al Señor en presencia de toda la asamblea: ¡Oh Señor, Dios de nuestro antepasado Israel, que seas alabado por siempre y para siempre! Tuyos, oh Señor, son la grandeza, el poder, la gloria, la victoria y la majestad. Todo lo que hay en los cielos y en la tierra es Tuyo, oh Señor, y este es Tu Reino. Te adoramos como el que está por sobre todas las cosas.  La riqueza y el honor solo vienen de Ti, porque Tú gobiernas todo. El poder y la fuerza están en Tus manos, y según Tu criterio la gente llega a ser poderosa y recibe fuerzas. ¡Oh Dios nuestro, te damos gracias y alabamos Tu Glorioso Nombre! ¿Pero quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que podamos darte algo a ti? ¡Todo lo que tenemos ha venido de Ti, y te damos solo lo que Tú primero nos diste! (N.T.V.)

 

©      Gracias a Dios por todas Sus buenas dádivas en este año.

Según un artículo de una revista norteamericana, una mujer residente de Costa Mesa, California, encontró un pequeño paquete en el escalón de la puerta que contenía las llaves de un auto y una nota que decía:

©      "Este regalo es para ti porque te amo".

Además incluía un versículo de la Escritura y estaba firmada:

©      "Un ángel del Señor".

En la entrada de su casa había un auto último modelo, justo lo que necesitaba para reemplazar su auto ya viejo, el cual funcionaba mal.

 

La mujer estaba tan agradecida que colgó un cartel en la puerta de su garaje que decía: "GRACIAS DIOS". Un niño vecino le preguntó:

-       ¿Dejó caer Dios el auto desde el cielo?

La revista no informó cuál fue su respuesta, pero seguramente que ella no creía que el auto había caído del cielo. Ella simplemente deseaba comunicar su agradecimiento a su amigo anónimo, quien a lo mejor pasaba por allí. Pero su cartel también estaba haciendo una importante declaración:

©      Toda buena dádiva viene finalmente de Dios.

 

En el pasaje que estudiamos hoy podemos ver la gratitud de David, reconoció esta verdad cuando él y su pueblo celebraban las enormes ofrendas que se habían dado para la construcción del templo. Ellos pudieron haberse dado palmaditas de felicitación en las espaldas e intercambiar mutuas alabanzas por la generosidad del otro. Pero no lo hicieron así. David mostró sabiduría y madurez como líder de Israel al agradecerle a Dios todas sus bendiciones. Él sabía que cuando un regalo viene de manos humanas, es el Señor quien merece la alabanza.

 

CONFESIÓN DE FE:

ESTARÉ ETERNAMENTE AGRADECIDO CON DIOS, PUES TENGO LA SEGURIDAD QUE TODO LO BUENO QUE ME SUCEDIÓ Y LLEGO A MI VIDA ESTE AÑO PROVINO DE ÉL.

 

ORACIÓN:

Señor Jesús, Elah Yisrael, Dios de Israel y Padre nuestro (Esdras 5:1). Tu, mi amado Señor Jesucristo, eres un Dios Grande y Poderoso, un Padre bueno que tiene cuidado de nosotros tus hijos, y siempre estas atento a proveernos con dádivas maravillosas del cielo; tus bendiciones son permanentes y abundantes, por eso quiero darte gracias hoy de una manera especial, pues en mi vida te has manifestado día a día con prodigios, milagros y delicias que llenan mi ser de gozo y alegría. Gracias Adonai, Tu eres el Señor de señores y Rey de reyes, mí amado Señor y Salvador Jesucristo; gracias Padre Celestial por tu Hijo amado Jesucristo, el mejor regalo de mi vida; y gracias Espíritu Santo por Tu guía oportuna, dirección perfecta y consuelo permanente. Amén.


Juan Manuel Lamus O.