jueves, 24 de diciembre de 2020

 REGALO = BENEFICIOS

 

JUAN 1:14-18 Entonces la Palabra se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros. Estaba lleno de amor inagotable y fidelidad. Y hemos visto su gloria, la gloria del Único Hijo del Padre. Juan dio testimonio de Él cuando clamó a las multitudes: "A Él me refería yo cuando decía: Alguien viene después de mí que es muy superior a mí porque existe desde mucho antes que yo". De su abundancia, todos hemos recibido una bendición inmerecida tras otra. Pues la ley fue dada por medio de Moisés, pero el amor inagotable de Dios y su fidelidad vinieron por medio de Jesucristo. Nadie ha visto jamás a Dios; pero el Único, que es Dios, está íntimamente ligado al Padre. Él nos ha revelado a Dios. (NTV)

 

De los beneficios del más grande, el mejor, el más necesario y provechoso regalo que hayamos recibido de Dios ¡Jesucristo!

 

En Navidad, pensamos en un recién nacido en un pesebre. Esta dulce imagen es, por supuesto, de mucho significado para nosotros, pero se ha vuelto tan común en nuestra cultura, que tendemos a no ver la inmensidad del nacimiento del Señor Jesús y sus grandiosas implicaciones para nosotros.

Veamos los tres principales privilegios que nos llegan mediante el regalo que Dios nos dio por medio de su Hijo.

1.     Relación Personal. Tenemos una relación personal con el Dios Omnisciente, Omnipotente y Omnipresente. Él es el Buen Pastor que cuida de nosotros de manera individual e incondicional. El Señor hará todo lo que sea necesario para mantenernos cerca de Él; no importa de qué manera pequemos, Él nunca nos negará.

¡Qué seguridad y qué valor tenemos gracias a su gran amor!

2.   Amistad Íntima. Jesús dice que Él es nuestro amigo fiel, digno de confianza en todo momento, ya sea en tiempos de sufrimiento o de alegría. El Señor ofrece una relación que todos anhelamos tener, pues solo Él puede llenar permanentemente el vacío de nuestra alma.

3.    El Espíritu Santo. En el momento que somos salvos, Dios nos da otro regalo, su Espíritu Santo que mora en nosotros, nos aconseja, enseña y capacita para hacer su voluntad. Él nunca nos dejará y, de hecho, un día disfrutaremos de su compañía en el cielo eternamente.

 

¡¡¡El Señor Jesús es nuestro Pastor, Amigo y Maestro!!!

Su nacimiento, muerte y resurrección, nos permite vivir abundantemente

en el presente y nos promete vivir eternamente junto a Él en el futuro

 

Hoy, día de Navidad, apartemos un tiempo de calidad para analizar con gozo y gratitud las innumerables bendiciones que tenemos en el Señor Jesús.

 

CONFESIÓN DE FE:

SÉ QUE MI SEÑOR JESÚS HA TRAÍDO Y TRAERÁ MUCHOS BENEFICIOS A MI VIDA, LOS CUALES HAN HECHO DE MÍ UNA NUEVA CRIATURA, Y EL GOZO Y LA GRATITUD QUE TENGO POR ESTOS SON INCALCULABLES.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Kjesed, Dios de Amor Fiel e Inagotable (Salmo 25:6). Gracias Dios Padre porque eres en mí Presencia de Vida Perpetua. Desde mi silencio siento como mi Amor te busca y se funde con el tuyo, y en este maravilloso todo y uno, la luz, la paz y la armonía nos acercan infinitamente. Sé que no hay nada que pueda separarnos porque soy parte de Ti, esa parte que siempre cuidas y velas con esmero, paciencia, sabiduría, perdón y misericordia. Gracias por el Amor-Hijo hecho carne en un pesebre, por el Espíritu que nos cubre, envuelve y alimenta con tu Verdad a cada instante. Humilde y rendido ante tu Presencia recibo con fe lo que en mis manos pones, acepto lo que debes darme y es así en mí tu Voluntad, ahora y siempre. Señor Jesús gracias por todos los beneficios que has traído a mi nueva vida al nacer en el pesebre de mi corazón; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén! 

Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri