jueves, 4 de junio de 2015

INTERVENCIÓN

 

SALMO 27:13,14 Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová en la tierra de los vivientes. Aguarda a Jehová; esfuérzate, y aliéntese tu corazón; sí, espera a Jehová. (V.R.V.)

 

©      A la espera de la intervención de Dios.

©      ¿Está usted esperando en este momento que el Señor intervenga de alguna manera en su vida o en la vida de un ser querido?

Una de las luchas que enfrentamos como cristianos es tratar de entender por qué nuestro Padre Celestial a veces se tarda en asuntos que son tan urgentes para nosotros. Solamente el Señor sabe todas las razones.

 

Sin embargo, hay varios ajustes que podemos hacer en nuestra actitud y manera de pensar mientras esperamos:

1.   Precise su enfoque.

En la necesidad apremiante del momento es fácil centrar nuestra atención en la necesidad, en vez de Dios. Podemos empezar esperando en el Señor, pero terminamos esperando la respuesta que queremos. Pronto estamos más interesados en lo que Él puede hacer por nosotros, que en Él. A veces, Dios se demora hasta que centramos nuestra atención en Él. El Señor quiere nuestro deleite en Él, no simplemente en lo que nos da.

2.   Deje sus expectativas en manos de Dios.

El Señor está obrando a favor nuestro, pero a veces nos aferramos con tanta fuerza al resultado que deseamos, que tenemos que esperar hasta abrir las manos y abandonar nuestras expectativas. Aferrarse a nuestras suposiciones en cuanto a cómo debe intervenir el Señor es emocionalmente agotador, pero a quienes confiamos en que Dios quiere lo mejor para nosotros, nos aguarda la paz en cada situación.

 

Recordemos que mientras esperamos, Dios está trabajando. Él ve el panorama completo, y está activo detrás del telón, ordenando todo conforme a Su voluntad. Pero Su trabajo más importante es ayudarnos a fortalecer nuestra relación con Él, a medida que aprendemos a amarlo y confiar en Él.

 

CONFESIÓN DE FE:

CONFÍO EN VER LA BONDAD DEL SEÑOR EN LA TIERRA DE LOS VIVOS. ESPERARE EN EL SEÑOR, SERÉ FUERTE, TENDRÉ FIRMEZA Y PONDRÉ TODA MI ESPERANZA EN SU OPORTUNA Y PERFECTA INTERVENCIÓN.

 

ORACIÓN:

Señor Jesús, Elah Shmaya Varah, Dios del Cielo y de la Tierra (Esdras 5:11). Dios, Rey y Señor mío, se que Tu, Dios Soberano, es quien reina sobre todo el universo, y no hay nada que no esté bajo Tu poder. Es por eso que hoy y siempre espero Tu perfecta y oportuna intervención en todos los asuntos de mi vida, pero Te pido que me ayudes a ser fuerte, estar firme y confiado para no desmayar, colocando mi enfoque y mis expectativas solo en Ti, para poder alcanzar y lograr el propósito que has determinado para mí. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús. Amén.

 
Juan Manuel Lamus O.