lunes, 10 de julio de 2017

AHORA HIJOS

 

1 JUAN 3:1-3 Miren con cuánto amor nos ama nuestro Padre que nos llama sus hijos, ¡y eso es lo que somos! Pero la gente de este mundo no reconoce que somos hijos de Dios, porque no lo conocen a Él. Queridos amigos, ya somos hijos de Dios, pero Él todavía no nos ha mostrado lo que seremos cuando Cristo venga; pero sí sabemos que seremos como Él, porque lo veremos tal como Él es. Y todos los que tienen esta gran expectativa se mantendrán puros, así como Él es puro. (N.T.V.)


©  Conocer a Dios como Padre, en el nuevo nacimiento, nos hace ahora verdaderos hijos de Dios.

Cuando escuchamos la palabra "padre", ¿qué imágenes nos vienen a la mente? ¿Un hombre que se pasa el día frente al TV o un hombre trabajador? ¿Alguien estricto o animoso? ¿Presente o ausente? No importa los atributos que puedan haber tenido nuestros padres, tenemos un Padre Celestial que es perfecto.

 

La vida del Señor Jesús nos ayuda a ver a Dios como nuestro Padre. Vemos al Salvador sosteniendo tiernamente a los niños, ocupándose de los enfermos y mostrando compasión a quienes no la merecían. Las palabras de Cristo nos hablan de un Padre que ama a la gente, que escucha las oraciones de sus hijos y que ofrece perdón movido por la gracia. El Señor Jesús reveló también que hay dos padres espirituales en este mundo: Dios Padre y satanás. Solo aquellos que han nacido espiritualmente en la familia de Dios pueden llamarle "Padre" a Dios. Este nuevo nacimiento (Juan 3:3) tiene lugar cuando una persona acepta el sacrificio expiatorio del Señor Jesús por sus pecados, recibe el bautismo en agua y del Espíritu Santo. Los que rechazan a Cristo, el único camino a Dios Padre (Juan 14:6), eligen, por tanto, al enemigo como su padre espiritual (Juan 8:42-45). Han creído en el padre de mentira y rechazado al Único Dios verdadero tal como se reveló en la persona de Jesús. Satanás vino para robar, matar y destruir (Juan 10:10), pero Jesús vino para que pudiéramos tener una nueva vida abundante y para ser reconciliados con Dios Padre.

 

Dios es sensible a cada necesidad que tenemos y ha prometido darnos lo mejor. Él se goza en dar cosas buenas a sus hijos y no usa nuestros pecados contra nosotros.

©  Usted, que es un hijo de Dios, ¿qué tan bien conoce a su Padre?

 

CONFESIÓN DE FE:

CONOZCO Y RECONOZCO A DIOS COMO MI PADRE, POR LO TANTO, SÉ QUE SOY UNA NUEVA CRIATURA GRACIAS A LA OBRA DEL ESPÍRITU SANTO EN MI POR MEDIO DE MI SEÑOR Y SALVADOR JESUCRISTO, ENTONCES TENGO LA POTESTAD DE SER LLAMADO HIJO DE DIOS.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Echad, el Dios Único (Malaquías 2:10). Mi amado Dios y Señor, Tú, el Todopoderoso, eres el Único Dios verdadero, así te he conocido y te reconozco como mi Padre Celestial, ya que gracias a tu amor y misericordia incomparables, he podido nacer de nuevo y convertirme en un verdadero hijo de Dios, un hijo tuyo, y todo esto gracias a la obra redentora de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, en el cual he creído sin condición, pero también gracias a la obra regeneradora del Espíritu Santo en mi vida, de tal manera que ahora como hijo, tengo también la responsabilidad de caminar como tal y trabajar con ahínco para que otros te conozcan, Padre Santo, y puedan hacer parte de esta maravillosa familia, como hijos, en la que Tú eres nuestro Único Padre, gracias Señor. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús. Amén.


 Juan Manuel Lamus O.