jueves, 9 de enero de 2020

MADURA

 

ROMANOS 4:17B-25 Eso sucedió porque Abraham creyó en el Dios que da vida a los muertos y crea cosas nuevas de la nada. Aun cuando no había motivos para tener esperanza, Abraham siguió teniendo esperanza porque había creído en que llegaría a ser el padre de muchas naciones. Pues Dios le había dicho: "Esa es la cantidad de descendientes que tendrás". Y la fe de Abraham no se debilitó a pesar de que él reconocía que, por tener unos cien años de edad, su cuerpo ya estaba muy anciano para tener hijos, igual que el vientre de Sara. Abraham siempre creyó la promesa de Dios sin vacilar. De hecho, su fe se fortaleció aún más y así le dio gloria a Dios. Abraham estaba plenamente convencido de que Dios es poderoso para cumplir todo lo que promete. Y, debido a su fe, Dios lo consideró justo. Y el hecho de que Dios lo considerara justo no fue solo para beneficio de Abraham, sino que quedó escrito también para nuestro beneficio, porque nos asegura que Dios nos considerará justos a nosotros también si creemos en Él, quien levantó de los muertos a Jesús nuestro Señor. Él fue entregado a la muerte por causa de nuestros pecados, y resucitado para hacernos justos a los ojos de Dios. (NTV)

 

De la fe madura, constante y perseverante.

Abraham es conocido como el padre de la fe, porque le creyó a Dios. Aunque a veces tuvo luchas para confiar en el Señor y dio algunos pasos en falso en el camino, su fe continuó fortaleciéndose. Al final, creyó la promesa de Dios de darle un hijo a pesar de que él y Sara ya eran ancianos.

 

Este es el camino que todos tomamos como creyentes. El camino de la fe comienza con la salvación y continúa hasta que lleguemos al Cielo. Al principio podemos tropezar, pero en el camino nuestro enfoque debe comenzar a cambiar: en vez de centrarnos en los obstáculos que enfrentamos miramos al Señor y en lugar de luchar contra las persistentes dudas en cuanto a la fidelidad de Dios, nos aferramos al conocimiento de que nos ama y siempre es fiel a su Palabra. Con el tiempo, nuestra vida comenzará a girar en torno al Señor. Cuando nuestras oraciones no sean respondidas de inmediato, confiaremos en la sabiduría de Dios y tendremos fe en que responderá a su manera y en su tiempo. En medio de las debilidades, los fracasos y el pecado, cultivaremos una perspectiva celestial por medio de la oración y la lectura de la Biblia. Y en lugar de sentir temor y preocupación, nos enfocaremos en la soberanía y las promesas de Dios.

 

Esta manera de pensar nos llevará a obtener una fe madura, que descansa en la bondad y suficiencia de Dios.

 

¡¡¡La vida cristiana se convierte en una oportunidad de ver lo que Dios hará en cada situación, entonces, como Abraham, comenzaremos a ver nuestros obstáculos

a través de los ojos del Señor, y nos fortaleceremos en la fe,

mientras le damos la gloria a Dios!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

YO DESCANSO EN LA BONDAD Y LA SUFICIENCIA DE DIOS, PUES SE QUE ES TODOPODEROSO Y ESTÁ SIEMPRE ATENTO A MIS NECESIDADES Y PRESTO A ACTUAR EN MIS DIFICULTADES, ESTO MADURA MI FE Y FORTALECE MI CARÁCTER, POR ESO LE DOY TODA LA GLORIA A ÉL.

 

ORACIÓN:

Mi Dios Todopoderoso, El HaNeeman, Dios Fiel y Confiable (Deuteronomio 7:9). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, se que todo lo que Tú, el Dios de lo imposible, dices y haces es verdad, así que eres completamente confiable. Por eso quiero en este día creer en Ti y creerte a Ti, mi Señor, a pesar de todos los enemigos que intentan apagar mi fe. Hoy dirijo mi mirada sólo hacia Ti, el autor y consumador de la fe, pues es seguro que cuando lo hago todas las cosas imposibles de mi vida las veo y se harán posibles, entonces mi fe madura y mi carácter se fortalece. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.