jueves, 25 de octubre de 2018

PROMETIDO

 

JUAN 14:23-26 Jesús contestó:

Todos los que me aman harán lo que Yo diga. Mi Padre los amará, y vendremos para vivir con cada uno de ellos. El que no me ama no me obedece. Y recuerden, mis palabras no son mías; lo que les hablo proviene del Padre, quien me envió. Les digo estas cosas ahora, mientras todavía estoy con ustedes. Sin embargo, cuando el Padre envíe al Abogado Defensor como mi representante, es decir, al Espíritu Santo, Él les enseñará todo y les recordará cada cosa que les he dicho.(NTV)

 

♥ Del Espíritu Santo prometido.

Jesús aseguró a sus seguidores que les convenía que Él se marchara de la Tierra. Así podría enviar su Espíritu, que juega un papel esencial en la vida de cada creyente (Juan 16:7).

 

El Espíritu Santo que habita en nosotros nos sirve como:

1.  Seguridad.En el momento de la salvación, somos sellados en Cristo por la tercera persona de la Trinidad. La presencia del Espíritu de Dios nos marca como hijos del Padre y garantiza que perteneceremos a Él para siempre (Efesios 1:13,14).

2.   Ayudador.El Espíritu Santo provee sabiduría, conocimiento y entendimiento (1 Corintios 2:12). Por ser Divino, conoce maneras de ayudarnos que ningún simple mortal puede siquiera imaginar. Él nos fortalece cuando estamos debilitados y ora por nosotros cuando no sabemos cómo hacerlo (Romanos 8:26).

3. Guía.El Espíritu Santo puede dirigirnos apropiadamente pues conoce la verdad de cada situación, los corazones de las personas que nos rodean, nuestros motivos y actitudes. Su guía será siempre correcta porque Él conoce la voluntad del Señor para nosotros (1 Corintios 2:9-11). Podemos confiar en lo que Él dice, pues no habla por su propia iniciativa, sino comunica lo que escucha del Padre (Juan 16:13,14).

4.  Fuente de Poder Espiritual.El Espíritu libera su poder en nuestras vidas con el fin de que realicemos un servicio fructífero y vivamos en santidad (Efesios 3:16). Esta autoridad Divina está siempre a nuestra disposición si nos rendimos a su control.

 

El Espíritu Santo es plenamente Dios y vive dentro de nosotros para que llevemos a cabo los propósitos Divinos del Dios trino para nuestras vidas. 

♥ ¿Está usted siguiendo su dirección?

 

CONFESIÓN DE FE:

VIVO PLENAMENTE CONVENCIDO QUE EL ESPÍRITU SANTO DE DIOS MORA EN MI Y ES QUIEN ME DA SEGURIDAD, ME AYUDA, ES MI GUÍA Y MI VERDADERA Y ÚNICA FUENTE DE PODER ESPIRITUAL, ASÍ QUE SERÉ FIEL A SU DIRECCIÓN PARA CUMPLIR CON EL PROPÓSITO QUE DIOS TIENE PARA MI VIDA.

 

ORACIÓN: 

Poderoso Dios Trino, El Elyon, El Altísimo (Génesis 14:18). Dios y Señor mío, hoy vengo a darte gracias por darme la hermosa persona del Espíritu Santo para ser mi Consolador, mi Ayudador, mi guía y la fuente de mi poder espiritual.  Es el Prometido que ha llegado a mi corazón, y esa promesa se hace realidad a través de mí, siendo el canal por el cual fluya el Espíritu Santo. Amado Señor y Salvador Jesucristo, en tu amor incondicional hoy puedo descansar y en tu misericordia hoy puedo confiar. Gracias por llenarme con tu Poder y guiarme en el camino de tu Sabiduría por tu Santo Espíritu, pues hoy he aprendido en tu altar, la Cruz del Calvario, que no estoy solo, dentro de mí está Él, para guiarme a toda verdad.  Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo por deleitarme con tus bondades y concederme la persona del Espíritu Santo como mi Consolador; he orado e tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.