viernes, 13 de julio de 2018

ANGUSTIA

 

MATEO 11:28-30  En esa ocasión, Jesús hizo la siguiente oración: "Oh Padre, Señor del Cielo y de la Tierra, gracias por esconder estas cosas de los que se creen sabios e inteligentes, y por revelárselas a los que son como niños. Sí, Padre, ¡te agradó hacerlo de esa manera! Mi Padre me ha confiado todo. Nadie conoce verdaderamente al Hijo excepto el Padre, y nadie conoce verdaderamente al Padre excepto el Hijo y aquellos a quienes el Hijo decide revelarlo".

Luego dijo Jesús: "Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y Yo les daré descanso. Pónganse mi yugo. Déjenme enseñarles, porque Yo Soy humilde y tierno de corazón, y encontrarán descanso para el alma. Pues mi yugo es fácil de llevar y la carga que les doy es liviana". (NTV)

 

♥ De cómo manejar las angustias. (Leer Jueces capítulos 6 y 7)

Gedeón fue alguien que experimentó gran angustia. Convencido de que Dios había abandonado a los israelitas, tenía que trillar el grano en un lagar para mantenerlo oculto de sus enemigos, los madianitas. Creía que su familia era una de las más débiles, y que él era inferior a cualquier hombre.

 

Dios llamó entonces a Gedeón, que de ninguna manera se consideraba a sí mismo capaz, para que liderara la lucha contra los madianitas. ¡Imaginemos su angustia! Pero obedeció y reunió a sus hombres, para luego ver que el Señor regresaba la mayoría de ellos a sus casas antes de la batalla. Aunque este giro de los acontecimientos pondría ansioso a cualquiera, el pueblo de Israel obtuvo la victoria porque fue el Señor quien ganó la batalla, y con ello Gedeón aprendió cuán poderoso y personal era su Dios (Jueces 6 y 7). Así como lo descubrió Gedeón, conocer a Dios estrechamente es una de las claves para hacer frente a la angustia. Quienes manejan bien la ansiedad conocen al Señor de manera personal, son los que proceden con calma, mientras que otros se ahogan en el estrés. Si se les preguntara cómo lo hacen, responderían: "Leyendo la Palabra. Orando. Confiando en Dios". Estas sencillas frases apuntan a una forma de vida, no a un método. Esa forma de vida está centrada en Cristo y está dedicada a conocerlo en por completo.

 

Los métodos del hombre para manejar la angustia sirven solamente para distraernos del estrés o para anestesiarnos. 

♥ El método de Dios sustituye nuestra preocupación con su paz.

 

CONFESIÓN DE FE:

CENTRARÉ MI VIDA EN CRISTO Y BUSCARÉ CONOCERLO POR COMPLETO, CON LA SEGURIDAD DE VIVIR SU ESTILO DE VIDA COMO EL MÉTODO QUE SUSTITUYE MI ANGUSTIA Y PREOCUPACIÓN CON SU PAZ.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, Jehová Shalom, el Dios de Paz eres Tú (Jueces 6:24). Mi Dios y Señor Jesús, se que la tranquilidad y el sosiego están asegurados en tu Presencia. Gracias Dios mío, humilde y rendido ante tu Presencia recibo con fe lo que en mis manos pones. Muchas veces he sentido tus manos levantándome cuando he estado caído, angustiado y con ansiedad, sé que habrás de levantarme cuantas veces sean necesarias, porque en Ti he confiado y sé que saldré siempre adelante con tu ayuda, pues Tú eres el Dios Todopoderoso que tienes en control mi vida. Gracias mi amado Señor y Salvador Jesucristo por llevar en Ti todas mis angustias y preocupaciones, he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.