miércoles, 16 de agosto de 2017

UNA NECESIDAD

 

LUCAS 24:44-49 Entonces dijo:

-  Cuando estaba con ustedes antes, les dije que tenía que cumplirse todo lo escrito acerca de Mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los Salmos.

Entonces les abrió la mente para que entendieran las Escrituras, y dijo:

-  Efectivamente, se escribió hace mucho tiempo que el Mesías debería sufrir, morir y resucitar al tercer día. También se escribió que este mensaje se proclamaría con la autoridad de su Nombre a todas las naciones, comenzando con Jerusalén: "Hay perdón de pecados para todos los que se arrepientan". Ustedes son testigos de todas estas cosas. Ahora enviaré al Espíritu Santo, tal como prometió mi Padre; pero quédense aquí en la ciudad hasta que el Espíritu Santo venga y los llene con poder del cielo. (N.T.V.)


©  El Espíritu Santo: Una necesidad. ¿Qué tan necesario es el Espíritu Santo para quienes desean tener una vida agradable a Dios? (Leer Lucas 24:35-49)

Como respuesta, podemos encontrar un claro ejemplo en la Biblia. Jesús había dicho a sus discípulos que esperaran en Jerusalén hasta su bautismo por el Espíritu (Hechos 2:1-4). Este grupo escogido de hombres había convivido con el Señor y escuchado sus enseñanzas por más de tres años; no obstante, Él sabía que no podrían iniciar su trabajo en el ministerio sin el socio divino que Dios había dispuesto para ellos. Lo mismo se cumple en nosotros hoy.


©  ¿Quién es el Espíritu Santo?

1. Es llamado la Tercera Persona de la Trinidad. Los otros dos miembros son Dios Padre y Dios Hijo. Al igual que ellos, Él es plenamente Dios. Algunos cristianos piensan erróneamente que el Espíritu es una fuerza o un poder, pero la Biblia dice que es una persona, alguien a quien podemos llegar a conocer.

2. Él es también la Promesa del Padre. Dios prometió enviar su Espíritu como consolador y ayudador de cada persona de su familia. Llamado el Espíritu de Verdad (Juan 14:16,17), Él se encarga de transformarnos a la imagen de Jesús.

3. Además, el Espíritu Santo es un Regalo para todo cristiano. En el momento de la salvación, Él es enviado a vivir dentro de cada creyente, sellándole como hijo o hija de Dios (Efesios 1:13). Nosotros no tenemos que orar para recibirlo, ni hacer nada para conseguirlo. Su Presencia es un regalo prometido que nos fue dado por Dios el día de nuestro nacimiento espiritual.

 

CONFESIÓN DE FE:

SÉ QUE AL CONOCER MEJOR AL ESPÍRITU SANTO Y ESCUCHAR CON ATENCIÓN LO QUE ÉL DICE EN LA BIBLIA, PODRÉ AGRADAR A DIOS PADRE (COLOSENSES 1:10). ENTONCES ASÍ LO HARÉ COMO BUEN HIJO DE DIOS, PUES ES UNA NECESIDAD.

 

ORACIÓN:

Espíritu Santo de Dios, Elohim Chaiyim, Dios Viviente (Jeremías 10:10). Santísima Trinidad, sé que ustedes son el Dios viviente, Único y Verdadero; el que está vivo y es el dador de vida; el que ha creado la vida y todo lo que vive; el que quiere dar vida eterna y abundante. Gracias quiero darte hoy Espíritu Santo, por llevarme a comprender toda la verdad acerca de tu Ministerio, por medio del cual he sido empoderado para servirte efectivamente, y de paso poder sentirme seguro, cuidado, protegido y sobre todo bien dirigido hacia la vida abundante que Jesús prometió, y que puedo hoy vivir a través tuyo. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús. Amén.


Juan Manuel Lamus O.