CENTRADA
2 CRÓNICAS 20:12,13 Dios nuestro, ¿acaso no vas a castigarlos? Es que no tenemos fuerza para enfrentar a semejante ejército que se nos viene encima. No sabemos qué hacer y por eso nuestros ojos están fijos en ti. Todos los hombres de Judá estaban de pie ante el Señor, junto con sus niños, sus mujeres y sus hijos. (P.D.T.)
© Del poder de la oración centrada en Dios. (Leer 2 Crónicas 20:1-18)
Alguien me preguntó una vez si yo me había escuchado orar a mí mismo. Como nunca lo había hecho, decidí grabar mi voz mientras oraba por algo que me tenía muy preocupado. Después de escuchar la grabación, pensé:
- "Señor, creo que yo tampoco respondería una oración así".
Estaba llena de descripciones negativas de la gravedad de la situación y de lo deprimido que me sentía.
Después de encontrarse repentinamente en una situación terrible, Josafat optó por una estrategia diferente, buscó al Señor por medio de la oración centrada en Él. En vez de venir al Padre Celestial con una actitud de "¡ay, pobre de mí!", hizo lo siguiente:
1. Comenzó por enfocarse en el poder y la soberanía del Señor (Vs.6),
2. En su fidelidad del pasado para con Judá (Vss.7,8), y
3. En su promesa de oír y salvarlos (Vs.9).
4. Solo después de fortalecer su fe por medio de estos recordatorios de la suficiencia de Dios, hizo su petición (Vss.10-12).
5. Josafat terminó su oración con las palabras:
- "No sabemos qué hacer, y a Ti volvemos nuestros ojos". (Vs.12).
Los ojos que están fijos en la imposibilidad de una situación, rara vez distinguen la dirección de Dios y su intervención a nuestro favor. Al orar, decidimos o magnificar al Señor o agrandar nuestra dificultad.
© ¿Se concentra usted en la fidelidad de Dios Todopoderoso?
© ¿O en lo abrumador del problema y los sentimientos negativos?
Mantengamos nuestros ojos fijos en el Señor, centrados en Él, y esperemos con confianza total hasta que veamos las cosas grandiosas que hará por nosotros.
CONFESIÓN DE FE:
SERÉ SABIO EN ESPERAR LA DIRECCIÓN DEL SEÑOR Y MANTENER MI ORACIÓN CENTRADA EN ÉL. ESTO NO SOLO FORTALECE MI FE, SINO QUE TAMBIÉN ME PERMITE VER SU RESPUESTA CON MÁS CLARIDAD.
ORACIÓN:
Señor Jesús, Elohim Mikarov, mi Dios que está cerca (Jeremías 23:23). Gracias quiero darte hoy porque Tú, el Todopoderoso, no eres un dios distante, por el contrario, siempre estás cerca de tu creación. No has creado el mundo y lo has abandonado, el morar y obrar de tu Espíritu Santo en mí, expresa supremamente esta verdad. Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo, porque puedo acudir a Ti en todo momento y circunstancia sin ninguna restricción, pero ayúdame a mantenerme centrado en Ti y no en mi queja, por mas grande y fuerte que sea el dolor causado por la tribulación o el problema. Sé que Tú has estado, estas y estarás ahí siempre para darme la mano y levantarme. Gracias Espíritu Santo por tu guía y tu protección permanentes. Amén.
Juan Manuel Lamus O.