lunes, 7 de octubre de 2024

DEFECTUOSOS O INFERIORES

 

ROMANOS 2:1-3 (NVI) Por tanto, no tienes excusa tú, quienquiera que seas, cuando juzgas a los demás, pues al juzgar a otros te condenas a ti mismo, ya que practicas las mismas cosas. Ahora bien, sabemos que el juicio de Dios contra los que practican tales cosas se basa en la verdad. ¿Piensas entonces que vas a escapar del juicio de Dios, tú que juzgas a otros y sin embargo haces lo mismo que ellos?

 

Muchas veces el complejo de inferioridad es una proyección de la propia condición, y lo peor de todo es que se manifiesta a través de la justicia propia.

 

Hay ciertas tiendas donde existe una sección, y en un nivel inferior, donde se encuentran mercancías disponibles a precios muy reducidos. La advertencia que recibe el cliente es una etiqueta especial que se ve en todos los artículos que se encuentran en esa sección. Todas las etiquetas llevan las mismas palabras: "Tal como está". Es una forma eufemística de decir: "Estos artículos son defectuosos".

 

Algunas veces los llaman ligeramente irregulares, lo que la tienda le está haciendo a sus clientes es una advertencia razonable:

"Este es el departamento donde están las cosas que tienen una falla. Aquí va a encontrar este tipo de defectos: una mancha que no sale, una cremallera que no funciona, un botón que no cierra, una costura descosida, etc., algún problema habrá, estos artículos no son normales, son defectuosos. No le vamos a decir dónde está el defecto. Usted va a tener que buscarlo, pero sí sabemos que existe, así que cuando lo encuentre, y lo va a encontrar, no venga a nosotros lloriqueando ni quejándose. Porque cuando se trata de la mercancía que está en este rincón inferior de la tienda, hay una regla fundamental: "NO hay devoluciones, NO se cambia, NO se regresa el dinero; son defectuosos". Si está buscando perfección se metió en el lugar equivocado, fuimos justos y se lo advertimos. Si quiere este artículo sólo hay una forma de obtenerlo, usted debe llevárselo "Tal como está, defectuoso".

 

Cuando se trata de la raza humana, somos el departamento de los "Tal como está, defectuoso" del universo.

☝🏼 ¿Cuántas veces nos desesperamos porque tenemos que convivir, trabajar, funcionar u operar al lado de alguien que no podemos tolerar porque tiene muchos defectos que nos desesperan?

Sí, él o ella tienen una etiqueta que dice: "Tal como está, defectuoso", pero si me miro al espejo, descubriré que yo también tengo la misma etiqueta. Por eso…

 

¡¡¡Necesitamos al Señor Jesucristo, porque sólo Él nos puede ayudar

a entender las debilidades que tenemos y gracias a Dios

que nos ha aceptado "Tal como estamos, defectuosos"!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

YO NO SOY INFERIOR, PORQUE MI IDENTIDAD, MI ACEPTACIÓN, MI APROBACIÓN, MI AMOR Y MI VALOR ESTÁN EN CRISTO JESÚS, SIN EMBARGO, MIRARÉ PRIMERO MIS DEFECTOS QUE LOS DE LOS DEMÁS, PARA NO CATALOGARLOS COMO INFERIORES, Y TRABAJARÉ EN ELLOS.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, Elohim Mishpat, Dios de Justicia (Isaías 30:18). Mi amado Dios y Señor, Jesucristo, yo sé que Tú eres perfectamente justo y que un día traerás justicia perfecta al mundo. Pero hoy quiero darte gracias Dios mío, porque me has hecho acepto en Cristo Jesús para alabanza de su Santo y Poderoso Nombre, el cual nos da el entendimiento para saber que nuestra identidad y valor están en Él, de manera que a tus ojos somos todos iguales, y ninguno inferior al otro. Por eso te pido, ayúdame a reconocer por siempre esta verdad e incrementar mis niveles de tolerancia para equilibrarlos con los de expectativa, de manera que pueda soportar con amor los defectos de mis semejantes y trabajar en los míos; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri