jueves, 29 de septiembre de 2016

DESEO

 

SALMO 145:17-20 Justo es el Señor en todos sus caminos y bondadoso en todas sus obras. Cercano está el Señor a todos los que le invocan, a todos los que le invocan de verdad. Cumplirá el deseo de los que le temen. Asimismo, oirá el clamor de ellos y los salvará. El Señor guarda a todos los que le aman, pero destruirá a todos los impíos. (R.V.A.'15)


©  Del deseo de nuestro corazón.

Si usted pudiera tener cualquier cosa en el mundo, ¿qué sería?

Su respuesta revela mucho acerca de quién es usted. El salmista escribe:

"Deléitate asimismo en Jehová, y Él te concederá las peticiones de tu corazón" (Salmo 37:4 VRV).

No hay nada malo en tener deseos; ellos nos motivan a lograr grandes cosas, pero no todos nuestros anhelos proceden de Dios.

 

Piense en sus aspiraciones, y lo que ellas dicen acerca de quién es usted:


1. ¿Desea tener una posición de autoridad para llevar las riendas?

Anhelar el avance personal para manipular a los demás revela una falta de integridad, mientras que una persona devota ansía la justicia.


2. ¿Sueña con la fama y la riqueza?

Quizás hay un vacío en su espíritu que está tratando de llenar. Pero solo Dios puede satisfacer las insaciables necesidades del corazón humano.


3. ¿Teme usted pedirle al Señor lo que quiere?

Tal vez piensa que Él no le escuchará, pero Dios nos dice que nos acerquemos a su trono con osadía y confianza (Hebreos 4:16).

 

Si el Señor no da una respuesta afirmativa a sus oraciones, pídale que los deseos que usted tiene sean ajustados a la voluntad de Él. No haga nada por su propia cuenta tratando de lograr lo que quiere. Hay siempre un alto precio a pagar por rebelarse contra Dios, pues Él cuida de nosotros generosamente, pero eso no significa que podemos esperar que nos dé todo lo que queramos.

Solo cuando nuestros sueños se alinean con su plan, Él los realiza.

 

CONFESIÓN DE FE:

ESTOY CONSCIENTE QUE LOS DESEOS Y PENSAMIENTOS QUE NOS PREOCUPAN SON UN BARÓMETRO EXACTO DEL ESTADO DE NUESTRA RELACIÓN CON CRISTO, ES POR ESO QUE SOMETO MIS PENSAMIENTOS A ÉL Y ESPERO QUE PONGA SUS DESEOS EN MI CORAZÓN PARA QUE SEAN CONCEDIDOS.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Rahee, Dios que Ve (Génesis 16:13). Mi amado Dios y Señor, Tú eres Dios que todo lo conoces y todo lo ves, por eso sé que también eres el único que puede ver las intenciones del corazón del hombre. Es por eso que hoy vengo con total devoción a tu Presencia, para pedirte que pongas en mi corazón tus deseos, que sean los tuyos, los correctos, los adecuados para que se cumpla tu propósito en mi vida, de manera que se alineen perfectamente con tu voluntad y entonces el fruto de ellos sea el adecuado para mí y para mi entorno. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús. Amen.


Juan Manuel Lamus O.