EL SERVICIO 2
JUAN 12:23-26 Jesús respondió:
- Ya ha llegado el momento para que el Hijo del Hombre entre en su gloria. Les digo la verdad, el grano de trigo, a menos que sea sembrado en la tierra y muera, queda solo. Sin embargo, su muerte producirá muchos granos nuevos, una abundante cosecha de nuevas vidas. Los que aman su vida en este mundo la perderán. Los que no le dan importancia a su vida en este mundo la conservarán por toda la eternidad. Todo el que quiera servirme debe seguirme, porque mis siervos tienen que estar donde Yo estoy. El Padre honrará a todo el que me sirva. (N.T.V.)
© Es necesario morir para poder servir y dar fruto abundante.
Una parábola:
Había una vez dos granos de trigo que estaban en el piso de un cálido y acogedor granero. Pero un día, el granjero entró y les dijo:
- Quiero sacarlos de este cómodo granero y plantarlos en tierra. Voy a ponerlos en el terreno frío y a cubrirlos con tierra. Será algo tenebroso, y ustedes morirán. Pero les aseguro que se multiplicarán y se volverán muy fructíferos.
El primer grano de trigo rechazó la sugerencia.
- ¡De ninguna manera!, dijo. No cuentes conmigo, me gusta mi comodidad, y no quiero morir cubierto de tierra.
Pero el segundo, después de considerar cuidadosamente el dolor y angustia de la muerte, decidió que la promesa de una cosecha futura valía la pena el sacrificio. Así pues, el agricultor lo llevó afuera y lo plantó en la tierra, y dejó al otro grano dentro del granero. Unos días más tarde, apareció un pequeño brote verde en el lugar donde había sido plantada la semilla. Tiempo después creció y se convirtió en un gran tallo de trigo que produjo cien granos más. Durante los siguientes cuarenta años, el agricultor plantó todas las semillas que se habían originado del primer grano de trigo, y año tras año, la cosecha era cada vez mayor.
En cambio, el grano de trigo que se quedó en el granero se mantuvo allí solo, sin multiplicarse jamás, pero muy cómodo.
© ¿Cuál grano de trigo es usted?
© ¿No corre riesgos, o ha dejado que Cristo lo plante en el mundo?
CONFESIÓN DE FE:
LA ÚNICA MANERA DE LLEGAR A SER ÚTIL Y FRUCTÍFERO EN EL REINO DE DIOS ES ABANDONAR LOS DESEOS EGOÍSTAS, SALIR DEL CASCARÓN Y SERVIR AL SEÑOR SIRVIENDO A LOS DEMÁS.
ORACIÓN:
Padre Santo, Adonai, Rey de reyes y Señor de señores (Deuteronomio 10:17). Dios mío y Señor mío, hoy quiero darte gracias por la vida de tu amado hijo Jesucristo, quien murió por todos nosotros, dando así la mayor muestra de servicio que ser alguno pueda dar, pero también vengo clamando a Ti, para que el corazón de siervo se arraigue en mi, de manera que no tema morir a mi egoísmo natural para ser fructífero en el servicio, como el grano de trigo que muere, es enterrado y germina para dar fruto abundante. Gracias mi amado Señor y Salvador Jesucristo por tu ejemplo de sacrificio de muerte para servir. Amén.
Juan Manuel Lamus O.