IMPACTAR
MATEO 5:11-14 Dios los bendice a ustedes cuando la gente les hace burla y los persigue y miente acerca de ustedes y dice toda clase de cosas malas en su contra porque son mis seguidores. ¡Alégrense! ¡Estén contentos, porque les espera una gran recompensa en el cielo! Y recuerden que a los antiguos profetas los persiguieron de la misma manera. Ustedes son la sal de la tierra. Pero ¿para qué sirve la sal si ha perdido su sabor? ¿Pueden lograr que vuelva a ser salada? La descartarán y la pisotearán como algo que no tiene ningún valor. Ustedes son la luz del mundo, como una ciudad en lo alto de una colina que no puede esconderse. (N.T.V.)
© De la bendición en medio de la oposición, como herramienta para impactar al opositor.
Al contrario de la popular pero mala teología, la salvación no garantiza una vida fácil. Es tentador presentar al cristianismo como un refugio que nos libra de dificultades, y solo atrae bendiciones. Esa clase de "fe" puede sonar bien, pero no es auténtica.
La verdad es que en este mundo no podemos evitar el conflicto, pero debemos aprender a enfrentarlo con valor y sabiduría. El gozo de nuestra fe es que el Señor nos da todo lo que necesitamos para enfrentar lo que se nos presente en la vida, y que Él tiene el poder de utilizar las cosas difíciles para nuestro bien. Podemos sentirnos tentados a no decir nada y a armonizar, en vez de encarar el ridículo; pero aunque hemos sido llamados a ser pacificadores, eso no significa que debemos aislarnos de quienes se oponen a nuestra fe. Pensemos en el ejemplo del Señor. Aunque Jesús era plenamente Dios, también era plenamente humano; sabía lo que era el aguijón del rechazo, al igual que nosotros (Hebreos 4:15). Pero fue tan valiente al desafiar al "statu quo", que los líderes religiosos exigieron su muerte. Puesto que estuvo en el centro de la controversia a lo largo de todo su ministerio, se apartaba con frecuencia para pasar tiempo con su Padre. Por eso, cuando estamos en medio de la persecución, podemos llegar a conocer al Señor de una manera nueva y profunda.
Así como la sal resalta el sabor de la comida, nuestra presencia puede impactar a quienes nos rodean, aun cuando nos critiquen o rechacen. Impacte usted al mundo siendo simplemente la persona para lo cual Dios le creó.
© ¡Sea fiel, y confíe en que Él está en acción! Y actúe usted también.
CONFESIÓN DE FE:
SIN IMPORTAR LA OPOSICIÓN, O LO QUE ME PUEDA SUCEDER, ESTOY PLENAMENTE DECIDIDO A IMPACTAR AL MUNDO, PARA ESO ME DISPONGO SIMPLEMENTE A SER LA PERSONA QUE DIOS CREÓ Y APARTÓ PARA UN PROPÓSITO ESPECIAL.
ORACIÓN:
Padre Santo, El Sali, Dios de mi Roca (Salmo 62:7). Dios y Señor Todopoderoso, hoy sé que puedo apropiarme de las promesas de tu Palabra, ya que ellas me respaldan y protegen de toda oposición, así que no dejare de trabajar en pos de impactar al mundo para que te puedan conocer, pero hoy quiero además citar al salmista en mi oración para declarar que: Solo el Señor es mi roca y mi salvación, mi fortaleza donde no seré sacudido. Mi victoria y mi honor provienen solamente de Dios; Él es mi refugio, una roca donde ningún enemigo puede alcanzarme. He orado en el Poderoso Nombre de mi Señor y Salvador Jesucristo. Amén.