INICIAR
SALMO 5:1-3 Oh Señor, óyeme cuando oro; presta atención a mi gemido. Escucha mi grito de auxilio, mi Rey y mi Dios, porque solo a Ti dirijo mi oración. Señor, escucha mi voz por la mañana; cada mañana llevo a Ti mis peticiones y quedo a la espera. (N.T.V.)
© Iniciar el día con oración en acción de gracias es una parte esencial de la vida devocional y de afirmación de la confianza en Dios.
Todos los días podemos levantarnos y confesar lo que queremos para nuestra vida, yo lo recomiendo y lo hago todos los días, me levanto y antes de ni siquiera poner un pie en el piso hago esta confesión que te recomiendo:
- Gracias Dios mío por un nuevo día, yo soy la más maravillosa creación tuya, y hoy decido ser feliz a pesar de mi mismo y de las circunstancias.
Inicia todos los días con tu corazón rebosante de amor, alegría y agradecimiento, gozoso de estar vivo, y de estar haciendo lo que estás haciendo, estando dónde estás, y viendo emerger la perfección de este día, gracias a Dios. Benditos sean aquellos que pueden ver la belleza, la alegría y la armonía que está a su alrededor, y apreciarla plenamente, y aquellos seres que reconocen en todo y en todos al Dios creador y dan gracias por ello. La alegría y la felicidad son como una piedra arrojada en el medio de un lago, las ondas que se generan van más y más hacia los lugares más lejanos de la orilla, y luego retornan al centro, llevando esta alegría y felicidad a todo lo que tocan en el camino. La felicidad no depende de las circunstancias o de personas, la felicidad es una decisión que tal vez tengas que tomar todos los días al iniciar.
Ahora el amor es como un bálsamo curativo, cura todas las heridas, todos los daños, todas las penas; el perfecto amor hecha fuera todo temor (1 Juan 4:18). De modo que ama con amor divino, ama lo que es digno de amar y lo que aparentemente no lo es. Ama a aquellos seres que no conocen el significado del amor, ama aún a los que por error llamas tus enemigos. Cuando tu corazón esté colmado de amor, no conocerás enemigos, porque el amor es el cimiento de la vida. Este también es una decisión y no un sentimiento, pues la Palabra dice que nunca deja de ser, así que si fuera un sentimiento eventualmente podría dejar de ser o acabarse.
CONFESIÓN DE FE:
INICIARÉ MIS DÍAS CON LA CERTEZA DE QUE DIOS LOS HIZO PERFECTOS PARA MI, APLICARÉ SU AMOR INCONDICIONALMENTE EN MI VIDA Y PERMITIRÉ DECIDIDAMENTE QUE LA FELICIDAD ESTE EN ELLOS.
ORACIÓN:
Dios y Señor mío, El Kjesed, Dios de Amor fiel e inagotable (Salmo 25:6). Padre Celestial, lindo y bondadoso, gracias por darme cada día un nuevo aliento y un nuevo despertar en tus brazos, gracias por derramar de tu amor y tu misericordia en mi vida, sé que es nueva todos los días, y por darme la oportunidad de expresarlos de la misma manera a mis hermanos, Tu eres grande y poderoso, y me siento privilegiado de poder descansar en Ti y mi en obediencia a tus preceptos. Gracias mi amado Señor y Salvador Jesucristo por ser bueno, amoroso y misericordioso conmigo, como lo has sido, eres y siempre lo serás. Amén.