jueves, 12 de agosto de 2021

LA INTRANSIGENCIA

 

ROMANOS 12:17,18 Nunca devuelvan a nadie mal por mal. Compórtense de tal manera que todo el mundo vea que ustedes son personas honradas. Hagan todo lo posible por vivir en paz con todos. (NTV)

 

De cómo reconocer la intransigencia y vencerla.

La intransigencia es la incapacidad de ceder en algún aspecto de la vida con el propósito de solucionar una disputa o una diferencia.

La intransigencia es una actitud inflexible que no acepta otros puntos de vista.

 

Hay muchas relaciones en las que al menos una de las partes tiene una actitud, en alguna medida, intransigente. Cuando se da esa actitud la comunicación tiende a bloquearse generando un enfriamiento en la relación. La intransigencia no solo afecta la comunicación, sino que genera contiendas y problemas de difícil solución justamente por causa de la actitud intransigente.Por ejemplo, si hay temas que no se pueden tratar en la relación porque son temas que van a producir contienda, esos temas son parte de una actitud intransigente. Si no se resuelven estos temas y no se llega a un acuerdo, la actitud intransigente puede provocar un rompimiento de la relación.

 

Todos los seres humanos tenemos algunas áreas en las que somos en alguna medida intransigentes, y eso tiene que ver con conceptos y criterios formados en nuestra mente por las creencias de la familia donde nos desarrollamos. También tiene mucha influencia el temperamento. Las personas con temperamento colérico son personas que manifiestan, generalmente en su vida adulta, una actitud intransigente.La actitud intransigente o cerrada, les pone límites a las personas y no pueden desarrollar toda su capacidad, debido a que no se abren a otras alternativas y posibilidades para hacer las cosas.

 

¡¡¡La intransigencia es una actitud soberbia, egoísta y orgullosa,

que se fortalece con la debilidad espiritual de las personas!!!

 

¿Qué podemos hacer para vencer la intransigencia?

1.     Reconocer: Lo primero es reconocer que sufrimos de esta enfermedad emocional en alguna medida y que debemos hacer algo para cambiar.

2.    Identificar: Luego es necesario identificar si esa actitud viene de creencias que adquirimos en nuestra etapa de formación y entender que lo que nos enseñaron, no es una verdad absoluta, sino simplemente una manera de ver las cosas, y tal vez un paradigma.

3.    Fortalecer. También es de vital importancia crecer y fortalecernos espiritualmente como estilo de vida, ya que la lectura de la Palabra de Dios, la oración y la asistencia regular a una Iglesia de sana doctrina, provocan el fortalecimiento del amor, la humildad y la paciencia, elementos fundamentales para desechar actitudes intransigentes.

 

Si reconoces ser una persona intransigente, toma la decisión hoy mismo de fortalecer tu vida espiritual y buscar ayuda apropiada para vencer esa actitud, convertirte en la persona que Dios quiere que seas y que tu familia necesita.

Tal vez sea tiempo de que comiences a ceder derechos.

 

CONFESIÓN DE FE:

PROCURARÉ CON DILIGENCIA TRABAJAR EN MI VIDA ESPIRITUAL PARA RECONOCER MI INTRANSIGENCIA Y ACTUAR EN CONSECUENCIA DE MANERA QUE PUEDA VENCERLA DE UNA VEZ POR TODAS, PARA APRENDER A CEDER DERECHOS.

 

ORACIÓN:

Padre Santo que habitas en el Cielo, Elohim Chasdi, Dios de mi amabilidad y benevolencia (Salmo 51:18). Hoy vengo clamando a Ti, mi Dios y Señor Jesucristo, para que me ayudes a ser esa persona que Tú quieres que sea y a mantener mis relaciones en equilibrio para poder atender los puntos de vista de los demás, y lograr así vencer la intransigencia que, en determinados aspectos o circunstancias, pueda aflorar en mi vida. Te doy gracias porque sé que de tu mano y bajo la dirección de tu Espíritu Santo lograré fortalecer mi amor, mi humildad y mi paciencia, elementos que me ayudarán sin duda a no ser intransigente y ceder derechos. Gracias Dios mío; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri