viernes, 28 de junio de 2019

ESPÍRITU SANTO

 

LUCAS 24:44-49 Entonces dijo:

-     Cuando estaba con ustedes antes, les dije que tenía que cumplirse todo lo escrito acerca de Mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los Salmos.

Entonces les abrió la mente para que entendieran las Escrituras, y dijo:

-      Efectivamente, se escribió hace mucho tiempo que el Mesías debería sufrir, morir y resucitar al tercer día.  También se escribió que este mensaje se proclamaría con la autoridad de su Nombre a todas las naciones, comenzando con Jerusalén: "Hay perdón de pecados para todos los que se arrepientan". Ustedes son testigos de todas estas cosas. Ahora enviaré al Espíritu Santo, tal como prometió mi Padre; pero quédense aquí en la ciudad hasta que el Espíritu Santo venga y los llene con poder del Cielo. (NTV)

 

Del relevante y poderoso Ministerio del Espíritu Santo.

La salvación se produce cuando ponemos la fe en Jesucristo como nuestro Salvador; Él nos perdona, nos transforma y nos ve como justos. En ese momento, somos redimidos, y aunque seguimos luchando con el pecado, éste es un enemigo derrotado. Luego, a medida que pasa el tiempo, nuestro servicio, nuestros dones y el amor al Señor deben, naturalmente, ser mayores. Lamentablemente, muchos cristianos que van a la iglesia cada semana sirven sin pasión y dejan de crecer.

¿Cómo es posible tal cosa?

 

Desgraciadamente, muchos creyentes no están conscientes del Ministerio del Espíritu Santo de Dios:

1.   El Espíritu Santo es un miembro de la Trinidad. Al igual a Dios Padre y Dios Hijo. El primer capítulo de la Biblia nos dice que Él ya era desde antes de la formación de la Tierra y que participó en la creación (Génesis 1:2 y 26). Hoy, Él tiene el papel fundamental de ayudar y aconsejar a todos los creyentes.

2.   El Espíritu Santo es un regalo para cada hijo de Dios. Su Presencia en nosotros no es algo que tenemos que ganar o conquistar. Más bien, es un maravilloso privilegio; por morar en nuestro corazón, Él puede guiar y fortalecer, mantener alejado al creyente del peligro y conducirlo a la verdad (Juan 16:7,8).

3.   El Espíritu Santo es la Vida Abundante. La Biblia nos dice que Jesús vino para que pudiéramos tener una vida abundante (Juan 10:10). Esto solo es posible cuando escuchamos su Espíritu y obedecemos.

 

¿Está usted teniendo la vida abundante que Jesús prometió?

Él no estaba hablando de circunstancias felices, sino más bien del gozo y el contentamiento que son posibles por medio de una relación con Él. Si usted tiene falta de esto, piense en cómo concibe al Espíritu Santo y ore por su dirección. El Espíritu Santo no es simplemente el poder impersonal o la energía de Dios. Él es verdaderamente Dios, un Ser personal. Jesús lo describió como nuestro Ayudador, Consolador y Consejero. Él nos da fuerza para que vivamos de tal forma que nuestras vidas agraden a Dios y nos da los dones que nos ayudan a alcanzar el propósito con el cual fuimos creados.

 

¡¡¡El Espíritu Santo, Dios Viviente, nuestro Ayudador, Consolador y Consejero!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

ESTOY CONVENCIDO Y APERCIBIDO DEL PODEROSO MINISTERIO DEL ESPÍRITU SANTO, PUES SÉ QUE ME GUÍA, DIRIGE, CUIDA, PROTEGE Y REDARGUYE, PARA CONOCER LA VERDAD Y PODER TENER LA VIDA ABUNDANTE QUE JESÚS PROMETIÓ.

 

ORACIÓN:

Espíritu Santo de Dios, Elohim Chaiyim, Dios Viviente (Jeremías 10:10). Santísima Trinidad, se que ustedes son el Dios viviente, único y verdadero; el que está vivo y es el dador de vida; el que ha creado la vida y todo lo que vive; el que quiere dar vida eterna y abundante. Gracias quiero darte hoy Espíritu Santo, por llevarme a comprender toda la verdad acerca de tu Ministerio, por medio del cual he sido empoderado para agradar a Dios Padre, servirle efectivamente y, de paso, poder sentirme seguro, cuidado, protegido y, sobre todo, bien dirigido hacia la vida abundante que Jesús me prometió, y que puedo hoy vivir a través tuyo. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús y la revelación de su Santo Espíritu ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.