jueves, 16 de junio de 2022

LA AUTOACEPTACIÓN

 

ISAÍAS 43:4,5A…7 Puesto que ante mis ojos tú eres de gran estima, y eres honorable, y Yo te amo, daré hombres por ti, y pueblos por tu vida. No temas, porque Yo estoy contigo… A cada uno que es llamado según mi Nombre y a quien he creado para mi gloria, Yo lo formé. Ciertamente Yo lo hice. (RVA'15)

 

De cómo la autoaceptación equilibra nuestra autoestima, viviendo una vida en armonía con lo que Dios determinó para ella.

Y el hecho real es que nuestra identidad, nuestro valor, nuestra aceptación, nuestra aprobación y nuestro amor están en la vida de Cristo Jesús; y no en lo que el mundo, e inclusive nosotros mismos podamos creer, percibir o aceptar.

 

Muchas personas simplemente no pueden creer que Dios las ame. Otras sí creen que Él las ama, pero solo cuando lo agradan de alguna manera.

¿Por qué es tan difícil para nosotros aceptar Su amor incondicional?:

 

1.     Una razón es porque nos resulta difícil amar a los demás sin condiciones.

Podemos decir las palabras "te amo", al cónyuge, a nuestros hijos, familiares, amigos, compañeros de trabajo o hermanos en la fe, pero con demasiada frecuencia calculando mentalmente si han estado o no a la altura de nuestras normas. A veces nos excusamos de amar a ciertas personas porque su conducta nos molesta o irrita. El hecho de que nosotros pongamos restricciones, o brindemos nuestro favor, nos lleva a suponer, erróneamente, que el Señor hace lo mismo.

 

2.    Otra razón es la baja autoestima.

Al sentirnos indignos, nos negamos a aceptar el amor de Dios. ¿Sabe una cosa? Ninguno de nosotros es digno de la bondad y la misericordia del Padre Celestial; por tanto, puede deshacerse ya de esa excusa de una vez por todas. No venimos a Él debido a nuestra valía, sino en Su Gracia, y nuestra posición está segura en Cristo. Considerarse "por debajo de Su Gracia", es pisotear su amoroso y generoso regalo.  Dios dispuso una asombrosa manera para que nos reconciliáramos con Él, el sacrificio de su Amado Hijo Jesucristo, y eso es evidencia de que su mayor deseo es relacionarse íntimamente con cada uno de nosotros.

 

Si usted no se siente amado, o si tiene problemas para aceptarse a sí mismo, pídale al Espíritu Santo que le muestre la verdad del amor que el Padre Celestial siente por usted, y el verdadero y gran valor que usted tiene para Él.

 

¡¡¡Debemos tener bien en claro que siempre fuimos, somos y seremos amados, 

valorados, aprobados y aceptados por Dios, y que nuestra identidad está en Cristo 

por lo que no depende de lo que otros piensen o digan de nosotros!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

SÉ QUE SOLO EL ESPÍRITU SANTO DE DIOS PUEDE HACER QUE LA VERDAD DEL AMOR ÁGAPE PENETRE PROFUNDAMENTE MI CORAZÓN Y ME AYUDE A VER EL VERDADERO VALOR QUE TENGO PARA DIOS PADRE, SIN IMPORTAR QUE EL MUNDO, O YO MISMO, PIENSE LO CONTRARIO.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Kjesed, Dios de Amor Fiel e Inagotable (Salmo 25:6). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, hoy te pido que pongas en mi la convicción de tu amor hacia mí y el que yo pueda amar a mis semejantes de esa manera, pero principalmente que pueda entender con absoluta claridad y convicción que mi identidad, mi valor, mi aprobación, mi aceptación y mi amor tienen un profundo fundamento en lo que soy para Ti, que pueda yo aceptarme como me has hecho y con lo que has determinado para mi vida, que viniendo de Ti es bueno, agradable y perfecto. Gracias, mi Señor y Salvador Jesucristo por tu Amor Ágape y el valor que le has dado a mi vida; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri