viernes, 26 de abril de 2024

¡ALABEMOS SU GRANDEZA!

 

ISAÍAS 40:25-31 (TLA) Nuestro Santo Dios afirma:

"Con nadie me pueden comparar. Nadie puede igualarse a mí".

Isaías dijo: "Levanten los ojos al Cielo: ¿quién ha creado todo esto? Dios hace que salgan las estrellas; las llama por su nombre y las ordena una por una. ¡Es tan grande su poder que nunca falta una estrella! Pueblo de Israel, ¿por qué te quejas? ¿Por qué crees que Dios no se preocupa por ti? Tú debes saber que Dios no se cansa como nosotros; debes saber que su inteligencia es más de lo que imaginamos. Y debes saber que su poder ha creado todo lo que existe. Dios les da nuevas fuerzas a los débiles y cansados. Los jóvenes se cansan por más fuertes que sean, pero los que confían en Dios siempre tendrán nuevas fuerzas. Podrán volar como las águilas, podrán caminar sin cansarse y correr sin fatigarse".

 

Es imposible comprender por completo la majestuosidad y el poder de nuestro Señor Jesucristo, y es por eso que la grandeza de Dios es digna de ser alabada, y debe llenar todos nuestros pensamientos. (Leer Isaías 40:12-31)

 

☝🏼 Cuando piensa en Dios, ¿qué le viene a la mente?

A menudo, tendemos a verlo de la manera que mejor se ajuste a nuestra necesidad o situación. Por ejemplo, si luchamos con la culpa, podríamos enfocarnos en su perdón. La verdad es que su carácter abarca mucho más de lo que podríamos comprender o explicar. A través del pasaje que estudiamos hoy, y que recomiendo leer completo, veamos uno de sus atributos, su grandeza; por el cual debe ser alabado en gran manera; nos dice que:

1.     Dios es más grande que la creación, porque fue por sus manos que llegó a existir todo lo que vemos. (Vs.12)

2.    Él es superior a las naciones o a cualquier ídolo creado por el mejor artesano. (Vs.17-20)

3.    De hecho, Dios está por encima del mundo y de toda la humanidad, sobrepasando incluso los cielos y las galaxias. (Vs.22,23)

4.   Los pensamientos y los caminos de nuestro Padre son mucho más grandiosos que los nuestros (Isaías 55:9), y elevados, en comparación con lo que podemos entender.

 

Bien dice la palabra en el Salmo 93:1 (NBV):

¡El Señor es Rey! Se ha revestido de majestad, de majestad se ha revestido y se ha armado con poder.

 

¡¡¡Pensemos en el Dios asombroso en quien creemos,

en realidad es digno de ser alabado, pues al comprender

siquiera una fracción de su grandeza, nuestra respuesta

debe ser de humilde alabanza y adoración!!!

 

Después de todo:

¿Quiénes somos nosotros para que Dios desee nuestra amistad, tanto que envió a su Hijo a morir por nuestros pecados?

 

CONFESIÓN DE FE:

SÉ QUE MI DIOS ES GRANDIOSO Y PODEROSO, Y ESAS VIRTUDES SE MANIFIESTAN TODO EL TIEMPO EN MI VIDA LLEVÁNDOLA A NIVELES INSOSPECHADOS POR MÍ Y LOS QUE ME RODEAN, POR ESO LO ALABARÉ Y LO ADORARÉ COMO SOLO ÉL ES DIGNO, Y DE MANERA ESPECIAL POR SU GRANDEZA.

 

ORACIÓN:

Padre Santo, El HaGadol, El Gran Dios (Deuteronomio 10:17). Mi amado Dios y Señor, Jesucristo, Tú eres grande en muchas maneras, tu naturaleza, tus atributos, tus obras, tu grandeza y, por supuesto, tus planes para nosotros tus hijos, los que en Ti creemos y los que en Ti confiamos. Esos planes no solo son grandiosos, sino que podemos estar seguros de que viniendo de Ti darán resultado, es decir que nosotros daremos fruto, y además reflejaremos tu gloria y te daremos honra sirviendo a nuestros semejantes, viviendo una vida de acuerdo con lo que somos, representantes de Jesucristo. Gracias Padre Celestial porque tu grandeza, digna de ser alabada, pues es una virtud tuya de gran bendición para mi vida. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri