jueves, 27 de octubre de 2016

TRANSIGENCIA

 

PROVERBIOS 2:1-7 Hijo mío, si aceptas mis palabras y atesoras mis mandamientos dentro de ti, si prestas oído a la sabiduría e inclinas tu corazón al entendimiento, si invocas a la inteligencia y al entendimiento llamas a gritos, si como a la plata la buscas y la rebuscas como a tesoros escondidos, entonces entenderás el temor del Señor y hallarás el conocimiento de Dios. Porque el Señor da la sabiduría, y de su boca provienen el conocimiento y el entendimiento. Él atesora eficiente sabiduría para los rectos; es el escudo de los que caminan en integridad. (R.V.A.'15)


©  De cómo evitar la transigencia en nuestra posición en Cristo. (Leer Proverbios 2)

Aunque la tentación de transigir en nuestra posición amenaza a todo creyente, no tenemos que ceder ante ella. Si somos conscientes del peligro y entendemos las consecuencias finales, podemos tomar la decisión de estar firmes y vigilantes en obediencia al Señor.

 

El primer paso para combatir esta situación es entender por qué es tan tentador. Es fácil ceder ante la presión de los demás para que tomemos parte en lo que sabemos que a Dios no agrada, para evitar el rechazo, pero cualquiera que esté decidido a vivir una vida agradable a Dios, debe estar dispuesto a soportar la persecución (2 Timoteo 3:12). Otras veces accedemos a actividades que violan nuestra conciencia, solo para evitar el conflicto, pero lograr la paz no debe ser a costa de sacrificar la obediencia a Dios. No obstante, esta tentación no siempre viene de los demás. De hecho, Santiago 1:14 dice que somos atraídos cuando nos dejamos llevar por nuestra propia concupiscencia. 

©  ¿Cuántos cristianos han caído en la inmoralidad sexual o la pornografía al ceder ante una segunda mirada? 

La codicia también nos lleva a cambiar nuestra postura. Si usted miente en su declaración de impuestos o se lleva algunas pertenencias de la oficina, ha pasado por encima de la línea de obediencia a Dios. Base sus decisiones en la verdad bíblica. Para permanecer firmes y no ceder ante otras posturas debe hacer de la Biblia su norma de conducta. Si usted comienza cada día meditando en su Palabra, Él guiará sus pasos. Cuando el Espíritu Santo le da una advertencia, obedezca de inmediato. Acceder a la tentación abre una puerta a Satanás.

 

CONFESIÓN DE FE:

HARÉ DE LA BIBLIA MI NORMA DE CONDUCTA, DE MANERA QUE NO CEDERÉ MI POSTURA EN CRISTO POR NINGUNA OTRA QUE ME PROPONGA EL MUNDO POR MÁS TENTADORA Y BUENA QUE PAREZCA, NO LE ABRIRÉ PUERTAS AL ENEMIGO.

 

ORACIÓN:

Padre Santo, Jehová Mekaddesh, el Señor que Santifica (Ezequiel 37:28). Glorioso Señor, Tú eres santo, único, especial, singular; eres Dios Todopoderoso y no hay nadie ni nada como Tú. Es por eso que creo firmemente que la santidad viene de acercarse a Ti, y que mientras más nos acerquemos más santos seremos. Gracias quiero darte hoy mi Señor, porque Tú has arraigado en mi corazón la confianza y la convicción necesarias para mantenerme inamovible en mis creencias, y no permitir que la transigencia pueda tentarme, pues tu Palabra es ancla fuerte y efectiva para mi corazón. Yo confieso todo esto en el Poderoso Nombre de Jesús. Amén.


Juan Manuel Lamus O.