miércoles, 24 de marzo de 2021

DOTADOS

 

TITO 3:6-8 Él derramó su Espíritu sobre nosotros en abundancia por medio de Jesucristo nuestro Salvador. Por su gracia Él nos declaró justos y nos dio la seguridad de que vamos a heredar la vida eterna. Esta declaración es digna de confianza, y quiero que insistas en estas enseñanzas, para que todos los que confían en Dios se dediquen a hacer el bien. Estas enseñanzas son buenas y de beneficio para todos. (NTV)

 

De la importancia de entender el verdadero propósito de Dios para nuestra vida.

¿Cómo servir a Dios sin estar dotados?

¿Cómo responde cuando encuentra oportunidades para servir a Dios?

Permítame enumerar algunas de las respuestas incorrectas:

"No puedo".

"Mi agenda está demasiado ocupada".

"No sé cómo hacerlo".

"No soy pastor".

 

Estas respuestas cierran la puerta antes de que sepamos si el Señor quiere o no que entremos. Usted quizás nunca ha pensado que negarse a servir a Dios es idolatría, pero eso es lo que es: doblegarse ante uno mismo en vez de someterse a Él. El Señor quiere que sus siervos estén dispuestos, primero, a hacer lo que sea; y después, a buscar conocer su plan específico para ellos.

 

Dios dota de manera especial a sus verdaderos seguidores,

para que le sirvan conforme a Su voluntad

¡¡¡El poder del Espíritu Santo supera las limitaciones humanas!!!

 

Pero cuando ya hemos decidido que no podemos hacerlo, que no lo haremos, o que no estamos bien preparados, estamos actuando entonces de acuerdo con nuestra voluntad, y eso no está bien. Usted puede servir al Señor como buen padre, o como quien comparte el evangelio con sus compañeros de trabajo, o como amigo que escucha a quienes estén sufriendo. No hay ninguna restricción en lo que Dios puede hacer con un seguidor dispuesto, pues el poder de su Espíritu supera las limitaciones humanas.

¿No se siente lo suficientemente valiente? Dios puede cambiar eso, dotarlo.

¿No tiene las aptitudes adecuadas? Dios puede cambiar eso, dotarlo.

 

Dejar las excusas es lo más sabio que podemos hacer para servir a Dios. Confíe en que el Señor le capacitará para hacer lo que Él le llame a hacer, y que se ocupará de dotarle y prepararle debidamente (Efesios 2:10; 2 Timoteo 3:16,17).

Lo único que Él le pide es que a su llamado diga "SI".

 

CONFESIÓN DE FE:

YO SÉ QUE SOY HIJO DE DIOS, DOTADO POR ÉL PARA BUENAS OBRAS Y PARA SER USADO HONROSAMENTE POR ÉL, Y CONFÍO EN QUE ÉL ME SEGUIRÁ DOTANDO DE LO NECESARIO PARA CUMPLIR CON SU PROPÓSITO DE SERVIR A LA SOCIEDAD, POR ESO LE DIGO ¡SI! A SU LLAMADO.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El HaGadol, El Gran Dios (Deuteronomio 10:17). Dios y Señor nuestro, Jesucristo, grande en poder y sabiduría eres Tú; gracias quiero darte hoy por escogerme y dotarme para servirte con mis semejantes. Sé que nada ni nadie podrá interponerse en tu propósito de servicio que has determinado para nosotros tus hijos, ni siquiera nuestra supuesta incapacidad o las respuestas incorrectas a tu llamado, pues Tú nos dotas con la fortaleza, el conocimiento, el amor y la sabiduría necesarios, para ejercer esa tan honrosa labor, con denuedo y responsabilidad. Gracias, mi Señor Jesucristo por tu ejemplo de servicio amoroso y desinteresado; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri