jueves, 9 de enero de 2025

EXAMINARLO TODO

 

1 TESALONICENSES 5:21-23 (PDT)

Examinen todo y quédense con lo bueno. Manténganse alejados de todo lo malo. Nosotros oramos para que Dios mismo, el Dios de paz, los purifique completamente para que pertenezcan sólo a Él. También pedimos para que todo su ser: su espíritu, su alma y su cuerpo permanezcan siempre sin mancha para cuando el Señor Jesucristo regrese.

 

Para iniciar algo nuevo y bueno, se debe someter todo a prueba, examinarlo bien para saber a que aferrase.

 

Muchas veces hemos encontrado pruebas en nuestro camino, pero estas sirven para revelar qué hay detrás de todo. Un diamante es uno de los recursos minerales más valiosos y atractivos que la naturaleza nos provee, sin embargo sabemos que pueden existir muchísimas imitaciones o piedras que aparentan ser diamantes. Solo sometiéndolos a prueba podremos distinguir entre un diamante bueno y uno malo.

 

De la misma manera, estamos llamados a someter todo a prueba, esto quiere decir que examinemos cada una de las cosas que hacemos, las personas con quienes nos relacionamos y las actitudes de nuestro corazón. (1 Corintios 15:33)

 

Talvez no todo en la vida es malo, no todas las personas ejercen

una influencia negativa, no todas nuestras actitudes o hábitos son malos,

pero por eso mismo debemos examinarlo todo…

¡¡¡Porque es necesario que nos aferremos a aquello que es bueno!!!

 

Este es el punto en el cual antes de seguir avanzando usted decide a lo que se aferra, pero para saber qué es bueno o no, debe detenerse a examinarlo todo. 

☝🏼 ¿Le conviene seguir relacionándose con determinada persona?

☝🏼 ¿Le conviene seguir teniendo los hábitos que hasta ahora tiene?

☝🏼 ¿Le conviene seguir aferrado a lo malo? 

Entonces piense, es tiempo de un cambio. ¡Aférrese a lo bueno!

 

Abstenerse de todo lo malo podría sonar un poco extremo, pero solo así en realidad podremos mantenernos en lo bueno. Dios ha puesto la capacidad en cada uno de nosotros para discernir entre lo bueno y lo malo, así que es tiempo de encender nuestros sentidos espirituales y retener todo aquello que es bueno, aquello que nos edifica, aquello que es provechoso, aquello que es de bendición, aquello que es contrario a lo malo y nos hace andar en lo bueno. (Deuteronomio 30:15,16)

 

Lo nuevo viene, así que debemos prepararnos para aferrarnos a ello.

 

CONFESIÓN DE FE:

PROCURARÉ CON DILIGENCIA Y SABIDURÍA DE LO ALTO, DISCERNIR SOBRE LO BUENO Y LO MALO QUE EN MI VIDA PUEDA ESTAR SIENDO DE GRAN INFLUENCIA: RELACIONES, ACTITUDES, HÁBITOS, ETC., DE MANERA QUE PUEDA EXAMINARLO TODO Y AFERRARME A LO BUENO QUE DIOS ME PROPONE PARA TENER UNA VIDA DIGNA, PLENA Y ABUNDANTE.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Emet, Dios de la Verdad (Salmo 31:5). Mi amado Dios y Señor, Jesucristo, sé que Tú, el Dios Único y Verdadero, eres la fuente última de la realidad, y todo lo que se relaciona contigo es verdad y es real. Tú sabes a que cosas malas estoy aferrado y los tesoros que tienes para mí en su lugar, yo te las entrego hoy con la seguridad de que tienes cosas más grandes y mejores para mí. Mi Señor y Salvador Jesucristo, gracias por ayudarme a examinarlo todo y entonces revelarme esta gran verdad, sé que en Ti puedo discernir claramente entre lo bueno y lo malo, y retener todo lo que me prometes en tu Palabra, pues eres un Dios que promete y cumple; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri