viernes, 15 de enero de 2016

PODER

 

HECHOS 1:7,8 Él les contestó:

-      Solo el Padre tiene la autoridad para fijar esas fechas y tiempos, y a ustedes no les corresponde saberlo; pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes; y serán mis testigos, y le hablarán a la gente acerca de Mí en todas partes: en Jerusalén, por toda Judea, en Samaria y hasta los lugares más lejanos de la tierra.(N.T.V.)

 

©  La importancia de la presencia del Espíritu Santo en la vida del cristiano, radica en el poder que imparte a sus vidas.

La vida cristiana sin tener en cuenta el poder del Espíritu Santo es como una religión hueca y vacía, llena de preceptos legalistas y aburridos.

©  El Espíritu Santo es la vida y el poder del cristiano y de la iglesia.

 

Sin la presencia del Espíritu Santo el cristianismo pierde su vitalidad. La diferencia entre el cristianismo y las religiones del mundo es que los hijos de Dios tienen dentro de su ser la viva y fresca presencia del Espíritu Santo, gracias a que un día ellos recibieron a Cristo como su Salvador personal y lo reconocen como el Señor de sus vidas. La presencia de Dios viene a nuestras vidas en el momento mismo de la conversión para darnos las arras o la señal interior de que somos verdaderos hijos de Dios, pero allí no termina el obrar del Espíritu Santo.

Posteriormente debemos buscar la llenura del Espíritu para que nuestra vida interior y exterior rebose de su Santa Presencia. El pasaje de hoy enseña claramente que el poder viene luego que haya venido la presencia del Espíritu Santo. Esta presencia, manifiesta en nuestras vidas el carácter de Dios o lo que comúnmente llamamos el fruto del espíritu. Cuando hablamos del poder estamos hablando de la capacidad que Dios nos da, de lo Alto, para que podamos servirle con efectividad. Todos los hijos de Dios necesitan el poder del Espíritu Santo para glorificar a Cristo, siempre glorifica a Cristo y lo exalta como el Señor.

 

Quizás su cristianismo se ha tornado en algo rutinario o aburrido, en algo frío y calculable. Este no es el cristianismo que el Señor ha prometido para los suyos. Él quiere derramar sobre su vida poder del Cielo para que usted disfrute no sólo la Presencia de Dios, sino para que también viva como más que vencedor, y de gloria en gloria cada día de su vida.

 

CONFESIÓN DE FE:

LO HE PODIDO EXPERIMENTAR GRACIAS A JESÚS, EL ESPÍRITU SANTO SE DERRAMA SOBRE MI VIDA VIVIFICANDO MI ESPÍRITU Y DÁNDOME PODER, PARA VIVIR COMO UN CRISTIANO VICTORIOSO Y DAR TESTIMONIO DE CRISTO.

 

ORACIÓN:
Señor Jesús, Glorioso Padre Celestial y Todopoderoso Espíritu Santo, Santísima Trinidad. Hoy vengo a tu Presencia buscando la revelación definitiva de tu amor y tu misericordia, pues estoy cansado de vivir ese cristianismo débil y falto de poder. Te pido en este momento que tu Presencia me revista de fuerzas del Cielo, para poder vivir un cristianismo victorioso, para dar testimonio con denuedo, es decir con conocimiento de causa y amor, de todo lo que Tú has hecho y harás en mi vida. Gracias Espíritu Santo de Dios por tu Presencia y tu Poder permanentes que has derramado sobre mí. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús. Amén.


Juan Manuel Lamus O.