VERDADERO
LUCAS 3:3-8 Entonces Juan fue de un lugar a otro, por ambos lados del río Jordán, predicando que la gente debía ser bautizada para demostrar que se había arrepentido de sus pecados y vuelto a Dios para ser perdonada. Isaías había hablado de Juan cuando dijo: "Es una voz que clama en el desierto: ¡Preparen el camino para la venida del Señor! ¡Ábranle camino! Los valles serán rellenados, y las montañas y las colinas, allanadas. Las curvas serán enderezadas, y los lugares ásperos, suavizados. Y entonces todas las personas verán la salvación enviada por Dios". Cuando las multitudes acudieron a Juan para que los bautizara, les dijo: ¡Camada de víboras! ¿Quién les advirtió que huyeran de la ira de Dios que se acerca? Demuestren con su forma de vivir que se han arrepentido de sus pecados y han vuelto a Dios. No se digan simplemente el uno al otro: "Estamos a salvo porque somos descendientes de Abraham". Eso no significa nada, porque les digo que Dios puede crear hijos de Abraham de estas mismas piedras. (NTV)
♥ Del verdadero arrepentimiento. (Leer Lucas 3:1-14)
Si usted ha visto alguna vez un desfile militar, sabe lo rápido que los soldados pueden girar y dirigirse en la dirección opuesta. Si ellos intentan hacer esto mientras están inmóviles, la orden es: "¡a la de-re!" o "¡a la iz-quier!" Si quieren volver atrás cuando están marchando, la orden es: "¡media vuelta, ar!". En ambos casos, hay un cambio abrupto que lleva en una dirección completamente diferente. Esta es una buena imagen de lo que es el verdadero arrepentimiento.
♥ Implica un cambio de mentalidad y comenzar a andar en la dirección contraria.
Uno de los más grandes predicadores del arrepentimiento en la Biblia es Juan el Bautista, quien llamó a sus oyentes a un cambio total de dirección. Él había visto demasiadas demostraciones aparentes de arrepentimiento sin ningún cambio de conducta. Juan insistía en que había personas que mostraban solo una contrición superficial, en lugar de "frutos dignos de arrepentimiento" (Vs.8 RV). Por lo que les exhortó a que compartieran su ropa y su comida, que fueran justos en sus negocios, y que estuvieran satisfechos con su paga (Vs.10-14). Es decir, debían cambiar su manera de vivir, y dejar atrás sus viejos patrones de conducta. Pero el arrepentimiento incluye algo más: la disposición de restituir a cualquier persona que hayamos perjudicado. Cuando Zaqueo, el cobrador de impuestos, recibió a Jesús en su casa, mostró la verdadera naturaleza de su arrepentimiento al decir: "Si en algo he defraudado a alguno, se lo devuelvo cuadruplicado" (Lucas 19:8).
♥ Pídale al Espíritu Santo que le revele cualquier rectificación que usted tenga que hacer.
CONFESIÓN DE FE:
BUSCARÉ EL VERDADERO ARREPENTIMIENTO APARTÁNDOME DE MIS PATRONES DE CONDUCTA HABITUALES, CAMBIANDO LA DIRECCIÓN DE MI VIDA Y RESTITUYENDO A LOS AGRAVIADOS.
ORACIÓN:
Señor Jesús, Elohim Selichot, Dios del Perdón (Nehemías 9:17). Mi Dios y Señor yo sé que los hombres podemos ser lentos para perdonar, pero está en tu naturaleza el perdonar a los verdaderamente arrepentidos. Amado Padre Celestial, gracias por tu Espíritu Santo que trabaja permanentemente en mí y me redarguye en cuanto a mis debilidades de carácter, pero a la vez me da la fortaleza necesaria para cambiar abruptamente la dirección mi vida. Así que yo estoy dispuesto a luchar de tu mano para evitar las consecuencias de mi pecado, los cuales yo sé que Tú perdonas, si estoy genuinamente arrepentido, aunque aquellas estén en tu potestad sufrirlas o no. Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo por tu amor y tu misericordia, por medio de los cuales perdonas todos los días mis faltas; he orado en tu Poderoso Nombre. Amén.