martes, 2 de junio de 2015

 

PREDILECTOS

 

JUAN 10:2-4…11…14,15 El que entra por la puerta es el pastor de las ovejas. El portero le abre la puerta, y las ovejas reconocen la voz del pastor y se le acercan. Él llama a cada una de sus ovejas por su nombre y las lleva fuera del redil. Una vez reunido su propio rebaño, camina delante de las ovejas, y ellas lo siguen porque conocen su voz… Yo Soy el Buen Pastor. El Buen Pastor da su vida en sacrificio por las ovejas… Yo Soy el Buen Pastor; conozco a mis ovejas, y ellas me conocen a mí, como también mi Padre me conoce a mí, y Yo conozco al Padre. Así que sacrifico mi vida por las ovejas. (N.T.V.)

 

©      Todos somos predilectos de Dios.

©      Cuenta una madre:

Cuando nació mi primera hija, la quería tanto que casi me dolía. Tontamente llegué a pensar que no iba a poder querer tanto a nuestro próximo hijo, o que tendría que dividir mi amor entre los dos para ser justa. Pero cuando nació nuestra segunda hija descubrí con alegría que la amaba tan intensamente como a la primera, aunque de una manera única. (Anónimo)

 

Esta bella anécdota me ayudo a recordar que nuestro Gran Dios es capaz de amar a cada uno de Sus hijos totalmente sin quitarle amor a ninguno, porque ama a cada uno de manera única. Por tanto, todo creyente que pide ayuda a Dios la recibirá tan completamente como si nadie más necesitara su atención.

 

©      En la vida y enseñanza de Jesús encontramos amplia evidencia de esto.

En el pasaje que estudiamos hoy, Él declaró que es "el Buen Pastor" que llama, cuida y conoce a Sus propias ovejas por su nombre, y que Él es conocido por ellas (Vss.3,11,14). Jesús entonces comparó esta relación entre pastor y ovejas con la relación que Él disfruta con Su Padre (Vs.15).

©      ¡Qué especiales somos para Él!

 

En respuesta a aquellos que nos advierten para que no actuemos como si el Señor tuviera predilectos, una vez escuché a un predicador decir:

-       "¡Claro que Dios tiene predilectos! ¡Todos somos sus predilectos!".

©      Como hijos suyos podemos estar seguros de su atención y amor.

 

CONFESIÓN DE FE:

SOY UN PREDILECTO DE DIOS Y EL SEÑOR JESÚS ES MI BUEN PASTOR, LO CUAL ME LLAMA A ENTENDER DE SU CUIDADO Y ATENCIÓN PERMANENTES, PERO TAMBIÉN A DISFRUTAR DE MI RELACIÓN CON EL PADRE CELESTIAL.

 

ORACIÓN:

Señor Jesús, Jehová Rohi, el Señor es mi Buen Pastor (Hebreos 13:20). Mi amado Rey y Señor mío, Tu proteges, provees, diriges, guías y cuidas a Tu pueblo, como ese Buen Pastor, nos cuidas tiernamente como un pastor poderoso y paciente. Gracias quiero darte hoy por ser Tú predilecto, porque puedo estar seguro que Tu mano amorosa, misericordiosa, consoladora y directora siempre estará sobre mí. Gracias por permitirme ser una oveja de Tu redil y de la misma forma amar y cuidar a todos por igual, sin distinción pero como predilectos. He orado en el Poderoso nombre de nuestro señor Jesucristo. Amén.


Juan Manuel Lamus O.