lunes, 1 de junio de 2015

ESPECIALES

 

2 TIMOTEO 2:19-21 La verdad de Dios se mantiene firme como una piedra de cimiento con la siguiente inscripción: "El Señor conoce a los que son Suyos", y "Todos los que pertenecen al Señor deben apartarse de la maldad". En una casa de ricos, algunos utensilios son de oro y plata, y otros son de madera y barro. Los utensilios costosos se usan en ocasiones especiales, mientras que los baratos son para el uso diario. Si te mantienes puro, serás un utensilio especial para uso honorable. Tu vida será limpia, y estarás listo para que el Maestro te use en toda buena obra. (N.T.V.)

 

©      ¿Se siente especial, o por el contrario, se siente insignificante?

Quizás le parezca que Dios tiene planes maravillosos para algunos cristianos, y que los está usando de maneras impresionantes, pero usted es apenas una persona común y corriente, y se pregunta:

-        ¿Por qué razón tendría Dios interés en mí?

La buena noticia es que toda persona es especial a los ojos de Dios, y que Él tiene un plan maravilloso para cada uno de nosotros. Cuando aceptamos a Cristo como nuestro Señor y  Salvador, Él nos aparta para un propósito, entonces somos santos y especiales.

 

Ahora pertenecemos a Él, y eso significa que no estamos aquí para vivir como nos plazca. Como hijos de Dios, existimos para glorificarlo y honrarlo a Él, llegando a ser cada vez más parecidos a Su Hijo en nuestro carácter, conducta y palabras. No es cuestión de seguir una lista de reglas, sino de dejar que Cristo viva a través de nosotros.

©      La Biblia llama a esto santificación.

Es un proceso mediante el cual el Señor cambia continuamente a sus seguidores por medio del poder de su Espíritu Santo que mora en nosotros. No estoy diciendo que dejaremos de ser pecadores, pero cuanto más nos rindamos a la dirección del Espíritu, tanto más tendremos la victoria sobre el pecado. A medida que nuestras viejas actitudes y hábitos sean sustituidos por actitudes y hábitos santos, nos volveremos siervos útiles en la familia de Dios.

Ser especial para el Señor no tiene nada que ver con la clase de trabajo que usted haga, ni con qué tan inteligente o exitoso sea. Se basa en a quién le pertenece usted.

©      ¿Vive usted como alguien que pertenece a Dios?

 

CONFESIÓN DE FE:

ESTOY CONVENCIDO QUE EL PLAN MARAVILLOSO QUE DIOS TIENE PARA MI VIDA SOLO PODRÁ REALIZARSE PLENAMENTE  SI ANDO EN OBEDIENCIA A ÉL, DE MANERA QUE SERÉ SANTIFICADO Y APARTADO PARA UN USO ESPECIAL.

 

ORACIÓN:

Padre Santo, Jehová Mekaddesh, Dios que Santifica (Ezequiel 37:28). Mi Rey y Señor, eres Santo, Único, Especial y Singular. Sé que hay un solo Dios y nadie ni nada como Tú, y que la santidad viene de acercarse a Adonai Mekaddesh y mientras más nos acerquemos más santos seremos. Gracias quiero darte hoy Dios mío, por Tu poder y soberanía sobre mi vida, pero quiero pedirte que me ayudes a ser fiel y firme en mis convicciones de manera que pueda vivir como alguien que verdaderamente Te pertenece y puede ser santificado y útil en Tu Reino. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús. Amén.

 
Juan Manuel Lamus O.