viernes, 8 de junio de 2018

¡NO!

 

SALMO 91:1-4 Los que viven al amparo del Altísimo encontrarán descanso a la sombra del Todopoderoso. Declaro lo siguiente acerca del Señor: Solo Él es mi refugio, mi lugar seguro; Él es mi Dios y en Él confío. Te rescatará de toda trampa y te protegerá de enfermedades mortales. Con sus plumas te cubrirá y con sus alas te dará refugio. Sus fieles promesas son tu armadura y tu protección. (NTV)

 

♥ ¡En su Presencia! Acepto su dirección y protección inquebrantable.

Es difícil oír la palabra no. Usted le suplica a Dios por cierta petición, pero esta le es negada. En especial puede sentirse confuso, desilusionado e incluso cuestionar los propósitos de Dios al negársela, y mas si la petición en cuestión era santa, positiva o usted creía que estaba de acuerdo a la voluntad de Él.

 

Sin embargo, debe saber que cuando su voluntad y la de Dios se contradicen, usted llega instantáneamente a un punto decisivo:

♥ ¿Se obstinará en hacer las cosas a su manera? o 

♥ ¿Aceptará la dirección de Dios? 

♥ ¿Ocupará usted el trono de su vida? o 

♥ ¿Reconocerá usted que su Señor y Salvador Jesucristo, es absolutamente soberano, bondadoso y sabio, y que nunca le hará daño?

Tenga por seguro que el "¡No!" del Padre Celestial es tanto compasivo como bueno. Debido a su carácter santo y su amor infalible, Él siempre procura darle la dirección absolutamente perfecta a su vida. Usted tal vez no comprenda el porqué de su "¡No!" en el momento, pero a la larga la entenderá y con seguridad se lo agradecerá por haberle evitado cometer un error.

 

CONFESIÓN DE FE:

SI LA RESPUESTA A MI PETICIÓN ES "¡NO!", ES PORQUE NO ES PARA MÍ, NO ES EL TIEMPO O LO MÁS SEGURO ES QUE DIOS TIENE ALGO MEJOR PARA MÍ. PERO TAMBIÉN DEBO MANTENER EL ENFOQUE Y SABER ESPERAR, POR ESO PUEDO DECIR: ¡EN SU PRESENCIA, ACEPTO LA DIRECCIÓN Y LA PROTECCIÓN INQUEBRANTABLE DE DIOS!

 

ORACIÓN:

Padre Nuestro, El Chanun, Dios lleno de Gracia (Jonás 4:2). Mi amado Rey y Señor Jesús, Tú eres mi autoridad y, sin que importe lo difícil que sea, acepto tu "¡No!", y confío en que Tú me guiarás de la mejor manera posible y tendré segura tu protección inquebrantable. Yo se, mi Señor, que tu naturaleza está llena de gracia para dar generosamente, aunque a veces no lo merezcamos, por eso estoy seguro que tu respuesta a mis oraciones, aunque demore o sea ¡"No"!, llegará en el momento preciso, cuando Tú lo determines. Mi confianza puesta en Ti, Dios Soberano y Bondadoso, me dice que siempre tendrás misericordia de mí, siempre estarás a mi lado y siempre sabes de antemano todas mis necesidades, que son suplidas de acuerdo a tus riquezas en Gloria en Cristo Jesús (Filipenses 4:19). Gracias amado Padre Celestial porque tu oído siempre está inclinado hacia mi clamor, mi suplica y toda petición, entonces ¡En tu presencia acepto tu dirección y protección inquebrantable! He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.