martes, 3 de junio de 2014

EN GUARDIA

 

EN GUARDIA

 

2 SAMUEL 11:2-5 Una tarde, después del descanso de mediodía, David se levantó de la cama y subió a caminar por la azotea del palacio. Mientras miraba hacia la ciudad, vio a una mujer de belleza singular que estaba bañándose. Luego envió a alguien para que averiguara quién era la mujer y le dijeron: "Es Betsabé, hija de Eliam y esposa de Urías el hitita". Así que David envió mensajeros para que la trajeran y cuando llegó al palacio, se acostó con ella. Luego ella regresó a su casa. (Betsabé recién había terminado los ritos de purificación posteriores a su período menstrual). Tiempo después, cuando Betsabé descubrió que estaba embarazada, le envió el siguiente mensaje a David: "Estoy embarazada". (N.T.V.)

 

©      Un momento de debilidad

Todos, en algún momento, tenemos que tomar decisiones cruciales que pueden acarrear consecuencias permanentes. El problema es:

©      ¿Estaremos preparados para cuando llegue ese momento?

 

David no estaba preparado para tomar una decisión que se le presentó de repente. En una ocasión que estaba inquieto, aislado y preocupado, la tentación y el pecado lo tomaron desprevenido.

Por tanto, debemos estar en guardia cuanto observemos estas señales en nosotros:

1.   Hambrientos. Nunca se permita estar demasiado hambriento. Cuando el cuerpo está debilitado por la falta de comida, es probable que tome malas decisiones. Cuide de su cuerpo, y dele el sostén que necesita.

2.   Enojados. No se permita estar demasiado enojado. La ira puede oscurecer el buen juicio y llevar a decisiones lamentables.

3.   Aislados. No esté demasiado aislado. Cuando usted se siente solo, puede hallarse dispuesto a hacer lo que sea para sentirse amado o aceptado.

4.   Cansados. No se permita estar demasiado cansado. El sueño es esencial para poder tomar decisiones prudentes. Cuando usted le niega a su cuerpo y a su mente un "tiempo de inactividad", es probable que tome malas decisiones.

 

Ser prudente en estos cuatro aspectos podrá evitarle más tarde lamentarse de la decisión que haya tomado, por eso debemos estar en guardia. Comprométase a nunca tomar decisiones importantes cuando se sienta hambriento, enojado, aislado o cansado. Más bien, reconozca en esos momentos de debilidad que no está preparado para razonar correctamente, ore y pídale sabiduría a Dios.

 

CONFESIÓN DE FE:

ME COMPROMETO A ESTAR EN GUARDIA Y APLAZAR CUALQUIER DECISIÓN, CUANDO ME SIENTA HAMBRIENTO, ENOJADO, AISLADO O CANSADO, HASTA QUE PUEDA ENFRENTARLA CON ORACIÓN, PACIENCIA Y SABIDURÍA DE LO ALTO.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Deot, Dios del Conocimiento (1 Samuel 2:3). Dios lleno de Sabiduría, El Todopoderoso, Tú conoces todo y eres la fuente de todo conocimiento. Sé que cualquier conocimiento que el hombre tenga, proviene de Ti, es por eso que hoy vengo a tu presencia para que me ayudes a estar en guardia, buscando de tu sabiduría primero que todo, para estar seguro y tomar decisiones claras que estén de acuerdo a tu voluntad. Gracias mi amado Señor y Salvador Jesucristo pues se que siempre puedo contar contigo y por eso mismo salir avante en cualquier momento de debilidad. Amén.


Juan Manuel Lamus O.