lunes, 12 de julio de 2021

CONTRA CORRIENTE

 

1 CORINTIOS 2:13,14 Les decimos estas cosas sin emplear palabras que provienen de la sabiduría humana. En cambio, hablamos con palabras que el Espíritu nos da, usando las palabras del Espíritu para explicar las verdades espirituales; pero los que no son espirituales no pueden recibir esas verdades de parte del Espíritu de Dios. Todo les suena ridículo y no pueden entenderlo, porque solo los que son espirituales pueden entender lo que el Espíritu quiere decir. (NTV)

 

De cuando pareciera que sería necesario decir: "Ya no puedo nadar más contra la corriente"; pero el Espíritu Santo nos fortalece y nos redarguye para seguir adelante y sin vergüenza vivir un cristianismo auténtico y no religioso.

 

Hay una película cristiana llamada "Deseo Cumplido", que cuenta la historia de un joven que había entregado su corazón a Jesús. Se encontraba agotado por las múltiples presiones de su entorno y harto de que lo llamaran "Aleluya", "Pandereto", y con otros apodos despectivos, simplemente por ser cristiano. También veía como otros se dedicaban a esperar que él cometiera algún error, para luego poner en evidencia la falta cometida por un cristiano. Pero lo que más le entristecía, era que sus compañeros de clase lo hacían a un lado por considerarlo un religioso. Se sentía tan desanimado y vencido, que llegó al punto de arrepentirse de haber conocido a Jesús y deseó volver atrás. Entonces su deseo se hizo realidad. Cuando despertó, tenía muchos amigos, ahora era muy popular. Los que antes lo rechazaban ahora lo invitaban a ir a rumbear todos los días, a tomar, a drogarse, etc. y entonces estaba haciendo de su vida lo que quería. Todo parecía marchar de maravillas, hasta que cayó en cuenta, que ahora le faltaban ciertas cosas muy importantes:

Sus padres se habían divorciado, ya nadie oraba por ellos.

Su mejor amigo se había suicidado, pudiendo él haberle presentado a Jesús como respuesta para su vida, sin embargo, ya era tarde.

Sus estudios se habían ido al traste, era un mediocre.

Finalmente se dio cuenta que todo lo que había perdido era más importante que un disfrute pasajero en medio de una vida vana y sin propósito.

 

A veces como cristianos tenemos que enfrentar humillaciones, rechazos, insultos o apodos de personas que no temen a Dios y piensan que seguirlo y obedecerlo es locura. Esto se puede tornar insoportable, sin embargo, debemos tener en cuenta que Dios está vivo y todo lo que hacemos para Él no es en vano…

 

¡¡¡Si Jesús resucitó y venció la muerte, es para que tú también seas un vencedor!!!

No nos cansemos de hacer el bien porque a su tiempo segaremos si no desmayamos (Gálatas 6:9)

 

Si en este tiempo te ha resultado difícil nadar contra la corriente, recuerda que no eres del montón, debes mirar más alto, no como el resto mira. Ya no te sientas mal cuando te pongan apodos, ¡enorgullécete! porque todo lo que ahora estás sembrando, lo cosecharás a su tiempo si no te desanimas, ¡Vamos! Ellos pueden dedicarse a cosas superficiales, pero tú "No" porque estás destinado por Dios para cosas grandes.

¡Sigue adelante! ¡No te canses, muy pronto verás que valió la pena!

 

CONFESIÓN DE FE:

HOY CONTINUARÉ NADANDO CONTRA LA CORRIENTE, Y RENUEVO MI COMPROMISO DE SEGUIR AL SEÑOR DONDE SEA QUE ÉL ME CONDUZCA Y DE OBEDECERLE SIN CONDICIONES, Y SIN IMPORTAR LO QUE EL MUNDO PUEDA DECIR DE MI.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, Elohim Elohay, Dios de dioses (Deuteronomio 10:17). Señor Jesús, El Camino, La Verdad y La Vida eres Tú (Juan 14:6), mi amado Señor y Salvador, estoy totalmente convencido, y por conocimiento de causa, que eres el único camino al Cielo, la única fuente de verdad y el fundamento de toda la vida. Es por todo esto, y mucho más, que yo quiero seguirte, caminar contigo, escuchar tu voz, esa que viene con el amor incondicional y la instrucción perfecta para que mi vida sea administrada correctamente, sea fructífera, cumpliendo así el propósito por el cual me creaste y por el cual debo seguirte y obedecerte sin condición, siendo un cristiano auténtico y no un religioso. Sin importar lo que el mundo pueda decir de mí. Gracias, mi Señor Jesucristo por ser el modelo de vida perfecto para aquellos que en Ti creemos, en Ti confiamos y a Ti te seguimos; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!

 

Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri