domingo, 6 de septiembre de 2020

LA BUENA COMUNICACIÓN EN EL MATRIMONIO

 

¡¡¡La comunicación en el Matrimonio

es como la sangre en el cuerpo, si no fluye muere!!!

 

PROVERBIOS 10:12

El odio provoca peleas, pero el amor cubre todas las ofensas. (NTV)

 

La relación matrimonial no es estática; por el contrario, es dinámica.

Está llamada a experimentar cambios y crecimiento.

Ajustes cuando identificamos que hay errores.

El problema radica en la reincidencia en hábitos y comportamientos equivocados, que somos conscientes, desencadenan conflictos.

No disponernos a evaluar y aplicar correctivos, agudiza la tensión y los enfrentamientos que deterioran el amor.

 

Entonces tengamos en cuenta los siguientes aspectos para desarrollar una buena comunicación en el matrimonio:

 

1.     LA COMUNICACIÓN COMO TAL

Un primer aspecto que debemos abordar es la comunicación en general.

Comunicarnos no es tan solo hablar y compartir ideas. Va mucho más allá.

Incluye saber decir las cosas, en qué momento decirlas y evaluar las consecuencias que desencadenan nuestras palabras.

 

Por ejemplo, muchos cónyuges prefieren callar y guardan el resentimiento en su corazón.

Si algo no les gusta, asumen el silencio. Su pretexto es que así evitan los conflictos o pelearse, o también, que eluden reproches del otro.

Con este comportamiento lo que alimentan es una rabia contenida que hacia futuro traerá como consecuencia conflictos mayores.

Hacerlo es peligroso como advierte el rey Salomón en el versículo que estudiamos hoy.

 

2.    NO CALLAR

El segundo aspecto para tener en cuenta, y que no es menos importante que el anterior es, no callar.

Todo aquello que genera inconformidad y dolor, debemos decirlo.

Aquí caben las palabras de Salomón, el afamado rey que marcó la historia de Israel, él también aconsejó:

 

PROVERBIOS 25:15

Dialogar pacientemente con los gobernantes los hace cambiar su manera de pensar; un diálogo amistoso tiene mucho poder. (PDT)

 

Cuando haya algo que no marche bien, hable con su pareja, una buena comunicación es lo más sano para la relación.

Si el diálogo se torna complicado y la otra persona se altera, no se deje arrastrar por el momento, cálmese y conserve la serenidad.

Tenga presente que el silencio es una forma de agresión, y no hablar con el otro de lo que siente y piensa puede acabar con el vínculo.

Hay que hablar, pero en el momento apropiado, una vez se calmen los ánimos entonces retome el tema.

 

3.    ORAR

Sobra decir que, en todo ese tránsito, se debe orar en pareja.

Es fundamental que lo hagan, y también de manera individual.

No olviden que Dios debe gobernar la relación familiar y que Él es quien nos ayuda a resolver los problemas.

 

4.   ¿Y QUÉ DECIR DE LOS CELOS?

Es un comportamiento que obedece a dos factores.

El primero: a la inseguridad de uno de los componentes de la pareja, y…

El segundo: a una mala comunicación.

Esta es la razón principal por la que muchas personas protagonizan escenas de celos y deterioran la unidad conyugal.

 

La celopatía es una enfermedad.

De acuerdo con la ciencia de la psicología, el celoso crea imágenes donde no las hay, tiene desconfianza absoluta, no se auto valora.

La víctima de celos debe entender que el otro es el que está equivocado y que debe buscar ayuda.

En tales casos hablar y conciliar los motivos que generan ese comportamiento, ayudará mucho en la construcción de una relación matrimonial sólida.

 

🙏🏼 ORACIÓN CONYUGAL PARA HOY:

 

Amado Dios y Señor Jesús, reconocemos hoy que, sin tu ayuda, los problemas no se resuelven fácilmente. Ayúdanos a tener la sabiduría que requerimos para saber conducirnos en un conflicto familiar. Permítenos asumir cuando hemos fallado y disponernos a cambiar. Creemos que, si nos guías, si ocupas el primer lugar en nuestras vidas y en nuestro matrimonio, tendremos una mejor calidad de vida en el hogar. Hemos orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!

 

CONCLUSIÓN:

Debemos hablar bien, claro y familiarmente, y procurar entender a nuestro cónyuge.

Debemos pedirle a Dios la sabiduría necesaria para saber escuchar a nuestro cónyuge

Y en caso de que ya hayamos fallado en la comunicación, comprometernos a cambiar.

 

¡¡¡Así es como funciona!!!

Tu matrimonio y tu familia son el tesoro más valioso que Dios te ha dado

¡¡¡CUÍDALOS!!!

 

Un Abrazo, Dios te bendiga y te guarde, haga resplandecer su rostro sobre ti,

y tenga de ti misericordia; y permita que prosperes en todas las áreas de tu vida,

y derrame sobre ti muchas bendiciones de Vida, Paz, Amor, Salud

y mucha Prosperidad


Juan Manuel Lamus O.