jueves, 24 de marzo de 2016

LA ÚLTIMA CENA DE CRISTO

 

MATEO 26:17-30

El primer día del Festival de los Panes sin Levadura, los discípulos se acercaron a Jesús y le preguntaron:

-  ¿Dónde quieres que te preparemos la cena de Pascua?

-  Al entrar en la ciudad, les dijo, verán a cierto hombre. Díganle: "El Maestro dice: 'Mi tiempo ha llegado y comeré la cena de Pascua con mis discípulos en tu casa'".

Entonces los discípulos hicieron como Jesús les dijo y prepararon la cena de Pascua allí.  Al anochecer, Jesús se sentó a la mesa con los Doce. Mientras comían, les dijo:

-  Les digo la verdad, uno de ustedes me traicionará. 

Ellos, muy afligidos, le preguntaron uno por uno:

-  ¿Seré yo, Señor? Jesús contestó:

-  Uno de ustedes que acaba de comer de este plato conmigo me traicionará. Pues el Hijo del Hombre tiene que morir, tal como lo declararon las Escrituras hace mucho tiempo. ¡Pero qué terrible será para el que lo traiciona! ¡Para ese hombre sería mucho mejor no haber nacido!

Judas, el que lo iba a traicionar, también preguntó:

-  ¿Seré yo, Rabí? Y Jesús le dijo:

-  Tú lo has dicho.

Mientras comían, Jesús tomó un poco de pan y lo bendijo. Luego lo partió en trozos, lo dio a sus discípulos y dijo:

-  Tómenlo y cómanlo, porque esto es mi cuerpo.

Y tomó en sus manos una copa de vino y dio gracias a Dios por ella. Se la dio a ellos y dijo:

-  Cada uno de ustedes beba de la copa,  porque esto es mi Sangre, la cual confirma el pacto entre Dios y su pueblo. Es derramada como sacrificio para perdonar los pecados de muchos. Acuérdense de lo que les digo: no volveré a beber vino hasta el día en que lo beba nuevo con ustedes en el Reino de mi Padre. 

Luego cantaron un himno y salieron al monte de los Olivos. (N.T.V.)

 

©  La última Cena, celebrada pocas horas antes de la crucifixión del Señor, era un Seder (rito de la Pascua).

Ø  Anteriormente, los símbolos de la fiesta habían señalado solo el rescate de los hebreos de Egipto.

Ø  Pero esa noche del jueves, Jesús reveló el significado mesiánico de dos símbolos:

 

V El Pan y El Vino.

 

El Seder, una bolsa de tela, con compartimientos separados, contiene tres galletas de matzá, o pan sin levadura. El matzá de en medio es sacado y partido. La mitad se rompe y se distribuye, y la otra mitad es envuelta en una servilleta, escondida, y vuelta a traer tras ser encontrada.

 

V El Pan = El Cuerpo

Cuando partió el pan, Jesús dijo: (Mateo 26:26)

-  Tomad, comed, esto es mi cuerpo.

 

En la Biblia, la levadura simboliza el pecado; por tanto, el pan no leudado representa al Dios santo. En la bolsa dividida, los matzás se unen, pero siguen siendo distintos, una imagen de la Trinidad:

©  El pan del medio representa al Hijo, quien dejó su posición al lado de su Padre para habitar entre nosotros (Gálatas 4:4), y fue molido por la humanidad (Isaías 53:5), envuelto en una sábana y puesto en una tumba (Mateo 27:59,60), y resucitado (Mateo 28:6).

©  De hecho, nuestra redención fue costosa (1 Corintios 6:20).

 

V El Vino = La Sangre

El otro símbolo que Jesús resaltó, se vierte cuatro veces en un Seder. Los eruditos creen que fue la tercera copa, conocida como la copa de la redención, lo que Jesús llamó: (Mateo 26:27,28)

-  Mi Sangre del pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.

 

©  Cuando hablemos de Cristo, sigamos su ejemplo de recibir a las personas en su nivel de entendimiento, y luego ayudémoslas a crecer.

©  Cuando usted participe de la Cena del Señor, piense en lo que Él hizo por usted, anhele su regreso, y recuerde que Él es nuestra Pascua.

 

1 CORINTIOS 5:7

Desháganse de la vieja "levadura" quitando a ese perverso de entre ustedes.

Entonces serán como una nueva masa preparada sin levadura, que es lo que realmente son.

Cristo, nuestro Cordero Pascual, ha sido sacrificado por nosotros. (N.T.V.)

 

Un Abrazo, Dios te bendiga y te guarde, haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; y permita que prosperes en todas las áreas de tu vida, y derrame sobre ti muchas bendiciones de Vida, Paz, Amor, Salud y mucha Prosperidad

Juan Manuel Lamus O.