jueves, 20 de abril de 2017

COMUNICACIÓN

 

1 CORINTIOS 2:9-14 A eso se refieren las Escrituras cuando dicen: "Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente ha imaginado lo que Dios tiene preparado para quienes lo aman". Pero fue a nosotros a quienes Dios reveló esas cosas por medio de su Espíritu. Pues su Espíritu investiga todo a fondo y nos muestra los secretos profundos de Dios. Nadie puede conocer los pensamientos de una persona excepto el propio espíritu de esa persona y nadie puede conocer los pensamientos de Dios excepto el propio Espíritu de Dios. Y nosotros hemos recibido el Espíritu de Dios (no el espíritu del mundo), de manera que podemos conocer las cosas maravillosas que Dios nos ha regalado. Les decimos estas cosas sin emplear palabras que provienen de la sabiduría humana. En cambio, hablamos con palabras que el Espíritu nos da, usando las palabras del Espíritu para explicar las verdades espirituales; pero los que no son espirituales no pueden recibir esas verdades de parte del Espíritu de Dios. Todo les suena ridículo y no pueden entenderlo, porque solo los que son espirituales pueden entender lo que el Espíritu quiere decir. (N.T.V.)


©  Del propósito de Dios con la comunicación por medio de su Espíritu.

No hay ninguna circunstancia en nuestra vida donde el Señor no nos hable. Podemos estar seguros de que cuando lo hace, sus palabras tienen siempre un propósito.


©  Considere algunos de los propósitos de la comunicación de Dios:

1. Dios quiere que comprendamos lo que Él nos está diciendo.

Como cristianos, podemos estar seguros de que esto sucederá porque el Espíritu Santo está presente en nosotros, y su Palabra garantiza que Él nos guiará a toda la verdad (Juan 16:13). Esto puede tomar tiempo y esfuerzo de nuestra parte, pero la intención del Señor es que entendamos claramente lo que Él está comunicando.


2. Dios quiere conformarnos a la imagen de Cristo.

Al leer la Biblia, su Espíritu puede señalar la compasión de Jesús hacia la mujer samaritana como nuestro ejemplo de vida; o el Señor puede alertarnos, por medio de la reprensión de Jesús a Pedro, a no depender del discernimiento humano. Nuestra responsabilidad es responder a sus palabras, alineando nuestra vida con la verdad y no oponer resistencia.


3. Dios quiere que se lo comuniquemos a otros.

Además, Dios revela verdades acerca de la vida en Cristo, para que podamos comunicar esos mismos principios a otros. Jesús decía solamente lo que su Padre Celestial le había enseñado (Juan 8:28). Del mismo modo, nosotros necesitamos escuchar cada vez que Dios hable, y así sabremos qué decir.

 

Dios tiene algo que decir a los obedientes y a los desobedientes, a los poderosos y a los débiles, a los perdidos y los salvos, a ti y a mí, así que escuchemos con atención.

 

CONFESIÓN DE FE:

NO IGNORARÉ LO QUE DIOS TIENE QUE DECIRME, MÁS BIEN PERMITIRÉ QUE TODO LO QUE SUCEDA EN EL DÍA ME ACERQUE A DIOS, Y ASÍ CULTIVARÉ EL HÁBITO DE DARLE TODA SU ATENCIÓN A ÉL.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Emet, Dios de la Verdad (Salmo 31:5). Señor Dios Todopoderoso y sabio eres Tú, y todo lo que hablas y comunicas, a los que en Ti creemos es verdad, y está fundamentado en la misma Verdad y Palabra que es Jesucristo nuestro Señor. Por eso hoy te pido, aclara y expande mi mente y mi sabiduría acerca de Ti y del misterio de tu existencia, para que pueda aceptar incondicionalmente todo lo que me comunicas, todos tus designios, tu mansedumbre, tu comprensión, tu misericordia, tus mandamientos, tus estatutos, tu infinito amor, tu sacrificio por mí y por todos mis hermanos. He orado en el Nombre que es sobre todo nombre, el Nombre de Jesús. Amén.


Juan Manuel Lamus O.