jueves, 1 de febrero de 2024

ORACIÓN & AYUNO

 

NEHEMÍAS 1:3,4 Me dijeron:

-      "Las cosas no andan bien. Los que regresaron a la provincia de Judá tienen grandes dificultades y viven en desgracia. La muralla de Jerusalén fue derribada, y las puertas fueron consumidas por el fuego". 

-       Cuando oí esto, me senté a llorar. De hecho, durante varios días estuve de duelo, ayuné y oré al Dios del Cielo, y dije… (NTV)

 

La oración y el ayuno combinados, son una excelente práctica para la búsqueda de Dios; son una disciplina espiritual que nos acerca más a Él y nos ayuda a conocer verdaderamente su voluntad para nuestra vida. (Leer todo Nehemías 1)

 

En el pasaje que estudiamos hoy podemos ver un claro ejemplo de lo que es y para lo que es el verdadero ayuno, veamos: el hermano de Nehemías llegó de Judá con malas noticias, los israelitas que vivían en Jerusalén estaban angustiados. Al enterarse de su sufrimiento, Nehemías ayunó y oró al Señor durante varios días. Durante ese tiempo, descubrió que Dios quería que pidiera ayuda al rey de Persia.

De acuerdo con esto podemos entender que:

 

¡¡¡Orar y Ayunar es una disciplina espiritual que nos ayuda

a centrar nuestra atención en el Señor, y en esa búsqueda

descubrir Su voluntad para todas las áreas de nuestra vida,

y adquirir el poder para actuar de acuerdo con ella!!!

 

Las personas ayunan de diversas maneras: algunas evitan los alimentos, mientras que otras se abstienen de varias actividades. El período de tiempo puede variar también. Pero el enfoque en cada caso debe ser el mismo:

🙏🏼 Buscar a Dios y descubrir Su voluntad para todas las áreas de nuestra vida.

 

Cuando nos negamos a nosotros mismos suceden tres cosas principales:

1.     El Espíritu Santo nos ayuda a dejar de lado los asuntos terrenales. Las relaciones, el trabajo y el placer ocupan un lugar secundario al concentrarnos en Dios y sus propósitos.

2.    Nuestra atención se desplaza de nosotros al Señor. Nuestra manera de pensar se vuelve más clara y nuestra capacidad para entender los planes de Dios se agudiza, porque no estamos distraídos en otras cosas.

3.    El Señor nos limpia espiritualmente. Su Espíritu nos convence de alguna actitud o conducta pecaminosas. Después de confesar nuestro pecado, somos perdonados y limpiados. (1 Juan 1:9)

 

Cuando nos llegan noticias inesperadas, como a Nehemías, es posible que nos preocupemos, él sabiamente buscó al Señor mediante la oración y el ayuno.

¡Hagámoslo! Practiquemos esta disciplina espiritual, beneficiosa para nuestro ser completo: alma, cuerpo y espíritu.

 

CONFESIÓN DE FE:

SÉ QUE LA PRÁCTICA DE LA DISCIPLINA ESPIRITUAL DE LA ORACIÓN Y EL AYUNO ME AYUDA, TAMBIÉN A MÍ ENTORNO, PARA ESCUCHAR CON CLARIDAD AL PADRE CELESTIAL Y A ENFRENTAR CADA SITUACIÓN DE ACUERDO CON SU VOLUNTAD.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Rachum, Dios de Compasión (Deuteronomio 4:31). Mi amado Dios y Señor, Jesucristo, sé que tu naturaleza es de amabilidad, pues Tú estás lleno de compasión y sentimiento por tu pueblo, y completamente libre de crueldad o mezquindad, pues tu compasión es infinita y llena de amor y misericordia en abundancia. Por todo esto y más, hoy quiero darte gracias, mi Señor, pues puedo acudir a tu presencia por medio de la oración y el ayuno, y estar seguro de que me dejarás saber tu buena, agradable y perfecta voluntad en cualquier caso o circunstancia que puedan agobiar mi vida, para yo actuar conforme a tu oportuna y exacta instrucción. Gracias Padre Celestial por la oración y el ayuno, herramientas que nos das para acudir a Ti con seguridad y escucharte con claridad. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri