lunes, 6 de marzo de 2023

TENEMOS LUZ

 

JUAN 1:1-9 En el principio la Palabra ya existía. La Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios. El que es la Palabra existía en el principio con Dios. Dios creó todas las cosas por medio de Él, y nada fue creado sin Él. La Palabra le dio vida a todo lo creado, y su vida trajo luz a todos. La Luz brilla en la oscuridad, y la oscuridad jamás podrá apagarla. Dios envió a un hombre llamado Juan el Bautista para que contara acerca de la Luz, a fin de que todos creyeran por su testimonio. Juan no era la luz; era solo un testigo para hablar de la Luz. Aquel que es la Luz verdadera, quien da luz a todos, venía al mundo. (NTV)

 

De la importancia de la misión que Dios nos encargó, pues si tenemos la Luz de cristo, somos llamados a que llevemos esa Luz a nuestros semejantes, especialmente en nuestra esfera de influencia.

 

En la Biblia, la luz se equipara al bien. Por ejemplo, Jesús dijo ser la Luz:

"Yo Soy la Luz que ha venido al mundo, para que todo el que crea en mí no viva en la oscuridad." (Juan 12:46 NBV)

 

Por otra parte, el mundo en que vivimos está en tinieblas (Juan 3:19), pero…

 

Una vez que confiamos en Jesús como nuestro Señor y Salvador,

Él vive dentro de nosotros por medio del Espíritu Santo, por lo tanto…

¡¡¡Cuando somos salvos, tenemos la Luz de Cristo con nosotros

y la responsabilidad de llevarla a los que andan en la oscuridad!!!

 

Justo antes de ascender al Cielo, Jesús ordenó a sus seguidores "hacer discípulos a todas las naciones" (Mateo 28.19,20). Este encargo, conocido como la Gran Comisión, sigue vigente. En otras palabras, los cristianos debemos llevar la Luz de Cristo a un mundo que anda en tinieblas. Pero, ¿cómo hacerlo? He aquí tres maneras:

 

1.     El Padre Celestial llama a los cristianos a difundir la buena nueva de salvación donde se encuentran; en sus comunidades, hogares, lugares de trabajo y estudio.

2.    Dios también enviará a algunos de nosotros al extranjero a anunciar la verdad de Jesucristo. Hay personas en otros países a las que nunca se les ha dicho cómo recibir la salvación, y podemos ir como misioneros a comunicarlo.

3.    El Señor pide a sus seguidores que contribuyan con los recursos que Él les ha dado, ya sea con dinero, capacidades o dones, para que su mensaje de salvación llegue al mundo.

 

¿Está usted dispuesto a hablar a otros acerca de Jesús y de todo lo que Él ponga en su mente? Pregúntele a Dios cómo le gustaría a Él que usted hiciera brillar Su Luz en el mundo. Luego, esté disponible y sea obediente para llevar a cabo el plan que Él disponga.

 

CONFESIÓN DE FE:

ESTOY PLENAMENTE CONVENCIDO DE QUE TENGO LA LUZ DE CRISTO Y DEL HONROSO LLAMADO QUE DIOS ME HA HECHO PARA LLEVAR A CABO CON DENUEDO LA GRAN COMISIÓN, POR ESO ESTOY DISPUESTO Y DISPONIBLE PARA LLEVARLA HASTA EL LUGAR DONDE ÉL QUIERA QUE YO VAYA.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El HaMakom, Omnipresente Luz a las Naciones (Isaías 42:6). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, hoy sé que Tú eres la Luz del mundo y que la has impartido a mi ser, por eso me propongo vivir en esa Luz y compartirla con quienes no la tienen, especialmente en mi esfera de influencia, y te pido que me fortalezcas para llevar a cabo esa misión que me has encomendado con convicción y denuedo, para que el verdadero propósito por el cual el Padre Celestial me creó sea cumplido a cabalidad, la salvación y el discipulado de los que aún no te conocen. Mi señor y Salvador Jesucristo, gracias por determinar que yo soy luz para el mundo, así como Tú lo eres; he orado en tu poderoso Nombre ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri