lunes, 15 de febrero de 2016

PUERTA

 

APOCALIPSIS 3:20,21 ¡Mira! Yo estoy a la puerta y llamo. Si oyes mi voz y abres la puerta, Yo entraré y cenaremos juntos como amigos. Todos los que salgan vencedores se sentarán conmigo en mi Trono, tal como Yo salí vencedor y me senté con mi Padre en su Trono. (N.T.V.)

 

©  De la puerta de nuestro corazón, la cual solo tiene cerradura por dentro, entonces el abrirla es nuestra decisión.

Un hombre había pintado un lindo cuadro. El día de la presentación al público en la galería donde estaba exponiendo su obra, asistieron las autoridades locales, fotógrafos, periodistas, y mucha gente, pues se trataba de un famoso pintor, reconocido artista. Llegado el momento, se tiró el paño que velaba el cuadro. Entonces se pudo escuchar un caluroso aplauso.

 

Era una impresionante figura de Jesús tocando suavemente la puerta de una casa. Jesús parecía vivo, con el oído junto a la puerta, parecía querer oír si adentro de la casa alguien le respondía.

 

Todos admiraban aquella preciosa obra de arte. Un observador muy curioso, encontró una falla en el cuadro. La puerta no tenía cerradura. Entonces fue a preguntar al artista:

-  ¡Su puerta no tiene cerradura! ¿Cómo se hace para abrirla?

El pintor tomó su Biblia, buscó un versículo en ella y le pidió al observador que lo leyera, entonces procedió diciendo:

-  Apocalipsis 3:20 He aquí, Yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré á él, y cenaré con él, y él conmigo.

-  Así es, respondió el pintor, esta es la puerta del corazón del hombre, la cual solo se abre desde adentro.

 

Abramos nuestro corazón al Señor Jesús, a su amor incondicional, Él quiere morar en y con nosotros, y por siempre en la Gloria del Padre Celestial. Esto también sugiere una transformación de nuestra vida, abramos la puerta, permitamos el cambio, aun estamos a tiempo. 

 

CONFESIÓN DE FE:

ABRIRÉ LA PUERTA DE MI CORAZÓN PARA QUE EL SEÑOR VENGA A VIVIR CONMIGO, Y A LA VEZ ESTARÉ DISPUESTO A TODO LO QUE DIOS QUIERA HACER EN MI VIDA PARA TRANSFORMARME Y CONVERTIRME EN UNA MEJOR PERSONA.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, Elohim Chaiyim, Dios de mi Salvación (Jeremías 10:10). Señor Jesús, hoy quiero darte las gracias por haber tocado a mi puerta, haber entrado en mi corazón y permanecer en él. Sé que Tu, El Fuerte, el Dios Todopoderoso estás vivo y eres el dador de vida, has creado la vida y todo lo que vive, y quieres dar vida eterna y abundante. Es por eso tan importante para mí, y tan relevante para mi vida, el que hayas tocado a la puerta de mi corazón y yo haya tomado la decisión de abrirla, porque desde ese instante mi vida  ha sido transformada por tu Presencia y sé que morare eternamente contigo en lo Gloria del Padre Celestial. Gracias Jesucristo por ser el Señor de mi vida y mi Salvador. Amén.


Juan Manuel Lamus O.