PADRES MALOS
Un día, cuando mis hijos estén lo suficientemente crecidos para entender la lógica que motiva a los padres y madres, yo habré de decirles:
¡¡¡LOS AMÉ LO SUFICIENTE!!!
© Los amé lo suficiente… como para haberles preguntado a dónde iban, con quién iban y a qué hora regresarían.
© Los amé lo suficiente… para no haberme quedado callado y para hacerles saber, aunque no les gustara, que aquél nuevo amigo no era buena compañía.
© Los amé lo suficiente… para hacerles pagar las golosinas que tomaron del supermercado o las revistas del expendio, y hacerles decir al dueño: Nosotros nos llevamos esto ayer y queremos pagarlo.
© Los amé lo suficiente… como para haber permanecido de pie dos horas junto a ustedes, mientras limpiaban su cuarto, tarea que yo habría hecho en 15 minutos.
© Los amé lo suficiente… para dejarles ver además del amor que sentía por ustedes, la decepción y también las lágrimas en mis ojos.
© Los amé lo suficiente… para dejarlos asumir la responsabilidad de sus acciones, aun cuando las penalidades eran tan duras que me partían el corazón.
© Y, ante todo, los amé lo suficiente… para decirles "no", cuando sabía que ustedes podrían odiarme por eso; y en algunos momentos sé que me odiaron.
Ésas eran las batallas más difíciles de todas. Pero estoy contento, vencí, porque al final ustedes ganaron también. Y cualquiera de estos días, cuando mis nietos hayan crecido lo suficiente para entender la lógica que motiva a los padres y madres, cuando ellos les pregunten si sus padres eran malos, mis hijos les dirán: Sí, nuestros padres eran malos.
¡¡¡Eran los padres más malos del mundo!!!
© Mientras los otros chicos comían golosinas en el desayuno, nosotros teníamos que comer cereales, huevos y tostadas.
© Mientras los otros chicos bebían gaseosas, comían papas fritas y helados en el almuerzo, nosotros teníamos que comer arroz, carne, verduras y frutas.
© Papá y Mamá tenían que saber quiénes eran nuestros amigos y qué hacíamos con ellos.
© Insistían en que les dijéramos con quién íbamos a salir, aunque demoráramos apenas una hora o menos.
© Ellos nos insistían para que le dijéramos siempre la verdad y nada más que la verdad.
© Y cuando éramos adolescentes, no sé cómo, hasta conseguían leernos el pensamiento.
¡¡¡Nuestra vida sí que era pesada!!!
© ¿Que nuestros amigos tocaran la bocina para que saliéramos?... Ellos tenían que bajar, tocar la puerta y entrar para que ellos los conocieran.
© A los 12 años, todos podían volver tarde por la noche… nosotros tuvimos que esperar hasta los 16 para poder hacerlo, y ellos se levantaban para saber si la fiesta había estado buena; sólo para ver en qué estado nos encontrábamos al volver.
© Por culpa de nuestros padres nos perdimos inmensas experiencias en la adolescencia: Ninguno de nosotros estuvo envuelto en problema de drogas, robos, actos de vandalismo, violación de propiedad, ni estuvimos presos por ningún crimen.
¡¡¡Todo fue culpa de ellos!!!
© Ahora que somos adultos, honestos y educados, estamos haciendo lo mejor para ser "Padres Malos", como fueron nuestros padres.
© Yo creo que este es uno de los males del mundo de hoy: no hay suficientes padres malos.
© ¡Aquéllos que ya son padres, que no se culpen, y aquéllos que lo serán, que esto les sirva como una alerta!
HEBREOS 12:7-10
Al soportar esta disciplina Divina, recuerden que Dios los trata como a sus propios hijos.
¿Acaso alguien oyó hablar de un hijo que nunca fue disciplinado por su padre?
Si Dios no los disciplina a ustedes como lo hace con todos sus hijos,
quiere decir que ustedes no son verdaderamente sus hijos, sino ilegítimos.
Ya que respetábamos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, entonces, ¿acaso no deberíamos someternos aún más a la disciplina del Padre de nuestro espíritu, y así vivir para siempre? Pues nuestros padres terrenales nos disciplinaron durante algunos años e hicieron lo mejor que pudieron, pero la disciplina de Dios siempre es buena para nosotros,
a fin de que participemos de su santidad. (N.T.V.)
Un Abrazo, Dios te bendiga y te guarde, haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia; y permita que prosperes en todas las áreas de tu vida, y derrame sobre ti muchas bendiciones de Vida, Paz, Amor, Salud y mucha Prosperidad