viernes, 31 de mayo de 2019

PACIENTES

 

SALMO 27:13,14 Sin embargo, yo confío en que veré la bondad del Señor mientras estoy aquí, en la tierra de los vivientes. Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia. (NTV)

 

Dios actúa a favor de nosotros, seamos pacientes.

Nos hemos acostumbrado tanto a este apresurado mundo, que hemos comenzado a exigir rapidez en nuestra vida espiritual. Pero, Dios actúa "a favor de quienes en Él confían" (Isaías 64:4). Los creyentes sabios aguantan hasta que aparecen los frutos de la obra de Dios.

 

Veamos tres razones por las que los creyentes son llamados a esperar:


1.   Dios puede estar preparándonos para recibir sus bendiciones.

Quizás nos hagan falta nuevas aptitudes o una mayor madurez. A veces, las personas necesitan discernimiento espiritual antes de recibir lo que sus corazones desean. Por ejemplo, David esperó varios años para sentarse en el trono que le había sido destinado, pero cuando lo hizo, era un rey sabio, fuerte y preparado para la batalla.


2.   El Padre Celestial, a veces, está enseñando a sus hijos a confiar en Él.

¿Cómo aprenderían los creyentes a tener fe si Dios les diera de inmediato todo lo que le piden? El Señor me ha dicho con frecuencia tres palabras: "confía en mí", y Él nunca ha llegado tarde para suplir mis necesidades. No importa cómo justifiquemos adelantarnos a Dios, eso equivale a decirle: "no confío en Ti".


3.   El señor se demorará, a veces, antes de darnos una bendición.

Él lo hace para protegernos de algo que no podemos ver. Es posible que nunca sepamos lo que causó la demora, pero tenga por seguro que Dios examina muy bien el objeto de nuestro deseo antes de ponerlo en nuestras manos.

 

Ser pacientes no es fácil, pero adelantarse al señor daña su plan. Quienes lo hacen quedan insatisfechos y viven con las terribles consecuencias.

 

¡¡¡Esperar en Dios no es perder el tiempo, es esperar lo mejor!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

SERÉ PACIENTE MIENTRAS QUE EL SEÑOR AFINA LOS DETALLES DE MIS BENDICIONES. CREO FIRMEMENTE QUE LO MEJOR DE ÉL ESTÁ EN CAMINO PARA EL RESTO DE MÍ VIDA.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Chanun, Dios lleno de Gracia (Jonás 4:2). Mi amado Dios y Señor Jesús, sé que tu gracia me cubre día a día y me colma con todos tus atributos y bendiciones, todas esas que tienes preparadas para mi, así que hoy solo te pido que me ayudes a ser paciente para esperar en Ti. Cuántas veces he sentido tus manos levantándome cuando he estado caído, sé que habrás de levantarme cuantas veces sean necesarias, porque confío en Ti y en que me sacaras siempre adelante. Humilde y rendido ante tu Presencia recibo con fe lo que en mis manos pones. Acepto lo que debes darme y es así en mí tu Voluntad ahora y siempre. Gracias Padre Fiel, por el Amor-Hijo hecho carne, por el Espíritu Santo que nos cubre, envuelve y alimenta con tu verdad a cada instante, de manera que nuestra confianza puesta en Ti nunca será defraudada. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.

        

jueves, 30 de mayo de 2019

LAS BENDICIONES

 

EFESIOS 1:3-14 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, quien nos ha bendecido en Cristo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales. Asimismo, nos escogió en Él desde antes de la fundación del mundo para que fuéramos santos y sin mancha delante de Él. En amor nos predestinó por medio de Jesucristo para adopción como hijos suyos, según el beneplácito de su voluntad, para la alabanza de la gloria de su gracia que nos dio gratuitamente en el Amado. En Él tenemos redención por medio de su sangre, el perdón de nuestras transgresiones, según las riquezas de su gracia que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría y entendimiento. Él nos ha dado a conocer el misterio de su voluntad, según el beneplácito que se propuso en Cristo, a manera de plan para el cumplimiento de los tiempos: que en Cristo sean reunidas bajo una cabeza todas las cosas, tanto las que están en los cielos como las que están en la tierra. En Él también recibimos herencia, habiendo sido predestinados según el propósito de aquel que realiza todas las cosas conforme al consejo de su voluntad, para que nosotros, que primero hemos esperado en Cristo, seamos para la alabanza de su gloria. En Él también ustedes, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de su salvación, y habiendo creído en Él, fueron sellados con el Espíritu Santo que había sido prometido, quien es la garantía de nuestra herencia para la redención de lo adquirido, para la alabanza de su gloria. (RVA'15)

 

De las grandes y maravillosas bendiciones de Dios para sus hijos.

Todos experimentamos momentos dolorosos en la vida, y lamentablemente, a veces llegamos a sentir como si Dios no estuviera bendiciéndonos, pero la realidad es que aun en momentos como esos, experimentamos muchas de sus maravillas.

 

A continuación, hay varios ejemplos de esas bendiciones:

1.     Tenemos la seguridad de que nuestro todopoderoso Dios nos escogió antes de la fundación del mundo (Vs.4). Nos predestinó como sus hijos (Vs.5). Podemos sentirnos especiales y queridos, porque el Soberano del universo nos eligió.


2.    Jesús hizo posible nuestra salvación por medio de su muerte y resurrección (Vs.7). Nos redimió del pecado que causa la separación de Dios y que al final conduce a la muerte. Como resultado, recibimos una naturaleza nueva y el perdón de nuestras iniquidades (2 Corintios 5:17; 1 Juan 1:9).


3.   El Espíritu Santo habita en nosotros. Nos guía, advierte y llena, por lo que siempre tenemos acceso a su consolación y dirección. Y porque Él también nos sella, nuestra vida eterna es segura (Vs.13).


4.  Nuestro Padre Celestial nos prepara una herencia imperecedera (1 Pedro 1:4). Podemos experimentar dificultades temporales, pero podemos vivir con la esperanza de que estaremos en la presencia de Dios por toda la eternidad, donde hay gozo y ningún sufrimiento.

 

Los creyentes en Cristo tenemos bendiciones espirituales maravillosas todo el tiempo.

Reflexione en estos beneficios y exprese gratitud a Dios, aun en los momentos difíciles que pueda estar atravesando.

 

CONFESIÓN DE FE:

ESTOY PLENAMENTE CONVENCIDO QUE SIN LOS CUATRO DONES PERMANENTES, O REGALOS DE DIOS, ANTES MENCIONADOS, EL TEMOR Y EL VACÍO SERÍAN ABRUMADORES. POR TANTO, LE EXPRESARÉ SIEMPRE MI GRATITUD, AUN EN LOS PERIODOS DE DIFICULTAD.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, Elohim Chaiyim, Dios Viviente (Jeremías 10:10). Mi Dios y Señor Jehová eres el Dios verdadero; el Dios vivo y Rey eterno; estás vivo y eres el dador de vida, Padre Santo y Poderoso, has creado la vida y todo lo que vive, quieres dar vida eterna y abundante. Gracias Dios mío, gracias por esos dones inefables, que no tienen explicación en cuanto a la incondicionalidad con los que los repartes; ayúdame Señor a que yo pueda aplicarlos, no solo a mi vida, como una verdad de peso, sino también propagarlos en mi entorno, a mis semejantes. Gracias Señor Jesús, el Dios de mi Salvación, gracias mi Señor y mi Salvador por todas las bendiciones que puedo recibir a través tuyo, he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.

         

miércoles, 29 de mayo de 2019

TEMOR Y ANSIEDAD

 

ISAÍAS 41:9-11 Yo te tomé de los extremos de la tierra, y de sus regiones más remotas te llamé diciéndote: 'Tú eres mi siervo; Yo te he escogido y no te he desechado. No temas, porque Yo estoy contigo. No tengas miedo, porque Yo Soy tu Dios. Te fortaleceré, y también te ayudaré. También te sustentaré con la diestra de mi justicia'. He aquí que todos los que se enardecen contra ti serán avergonzados y afrentados; los que contienden contigo serán como nada, y perecerán. (RVA'15)

 

Cuando el temor y la ansiedad nos invadan.

A lo largo de toda la Biblia, el Señor nos anima a no temer ni a estar ansiosos. Como hijos suyos, no tenemos ninguna razón para temer. Por supuesto, hay motivos para que seamos muy cautelosos en lo que hagamos, pero el pueblo de Dios no debe vivir en un estado de temor y ansiedad.

 

Podemos identificar al menos seis ansiedades comunes: el temor a la crítica, a la enfermedad, a la vejez, a la muerte, a la pobreza, y a la pérdida de un ser querido. Aunque son preocupaciones universales, en realidad son síntomas de algo muy profundo en nuestro interior, que alimenta nuestros temores.

 

Algunas de las causas son:

1.     Una sensación fundamental de insuficiencia. Por nuestra manera distorsionada de pensar, muchas veces nos sentimos incompetentes de enfrentar ciertos retos o tareas que sí podemos vencer.

2.    La tendencia a fijarnos estándares poco realistas. Podemos ir por la vida tratando de estar a la altura de expectativas muy elevadas que nos hemos impuesto nosotros mismos, no en los objetivos que Dios nos ha fijado.

3.    Una sensación innata de falta de méritos. Es sorprendente cuántas personas no tienen éxito en la vida porque simplemente no creen que merecen tenerlo.

 

En medio de nuestros temores y ansiedades, necesitamos recordar la promesa de Dios que se encuentra en el pasaje que estudiamos hoy:

"No temas, porque Yo estoy contigo; no desmayes, porque Yo Soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia".

Es importante que levantemos nuestra vista al Señor, no mirar las circunstancias que nos rodean. ¡¡¡Si el Eterno está contigo todo estará bajo control, no hay nada que temer!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

LEVANTARÉ MI VISTA HACIA LO ALTO, AL TRONO DE LA GRACIA, DONDE TODAVÍA SE ENCUENTRA MI DIOS Y SEÑOR, DE MANERA QUE NI LAS CIRCUNSTANCIAS, NI ABSOLUTAMENTE NADA, PODRÁN TRAER TEMOR NI ANSIEDAD A MI VIDA.

 

ORACIÓN:

Padre Santo y Todopoderoso, El Olam, Dios Eterno (Génesis 21:33). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, se que eres el Dios que todo lo puede, el Dios de los imposibles. Por esta razón y el testimonio de tu Presencia en mi vida, trabajando en pos de los propósitos que has deparado para mí, yo confío plenamente en tu protección, en tu sabiduría, en tu misericordia y especialmente en tu amor incondicional, ya que han sido tan evidentes en mi diario vivir. Tú eres mi castillo y mi fortaleza, así que estoy convencido, que el temor y la ansiedad no tienen parte conmigo ni harán mella en mi vida, pues de tu mano lo venceré. Gracias mi Señor y Salvador Jesús; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.

        

martes, 28 de mayo de 2019

BÚSQUEDA ENFOCADA

 

OSEAS 10:12 Yo dije:

-      "Planten buenas semillas de justicia, y levantarán una cosecha de amor. Aren la dura tierra de sus corazones, porque ahora es tiempo de buscar al Señor para que Él venga y haga llover justicia sobre ustedes". (NTV)

 

De los beneficios de la búsqueda del Señor con el enfoque correcto.

Todos dedicamos tiempo para buscar al Señor, pero para lograrlo tenemos que aprender a ajustar nuestro enfoque.

 

La razón por la que el enfoque es importante se debe a que llegamos a ser lo que contemplamos. Si fijamos nuestra atención en las cosas materiales y a las que apelan a nuestros sentidos, no pasará mucho tiempo sin que comencemos a inclinarnos en esa dirección. Le reto a no participar de formas de entretenimiento que pongan ideas nocivas en su mente.


1.     La Influencia: Aunque piense que esta actitud no tiene ninguna influencia en su vida, en realidad tiene un sutil pero terrible efecto controlador en usted.

2.    El Enfoque: Si, por el contrario, usted enfoca su amor y su atención en Jesús, llegará a parecerse más a Él. Como creyentes, podemos enfocarnos en Jesucristo cuando oramos, estudiamos la Biblia y meditamos en las verdades de Dios. Pero debemos profundizar más, al punto de que escuchemos al Señor y le digamos todo lo que hay en nuestro corazón. Si somos transparentes delante de Él, el Señor nos hablará directamente a nuestro espíritu.

3.    El Resultado: Si aprendemos a hacerlo, encontraremos que nuestra hambre y nuestra sed de todo lo demás comenzarán a disminuir. No es que nuestros deseos desaparecerán, sino que serán redirigidos. Usted descubrirá que tiene un hambre y sed cada vez mayor de Dios, y el anhelo de conocerlo de una manera personal y profunda. Y notará también que ahora experimentará en su vida un gozo rebosante que no puede ser detenido o sofocado.

 

Y todo esto, ¿Por qué razón? Porque después que usted haya comenzado a buscar con afán y el enfoque correcto al Señor, reconocerá que Él es su todo en todo.

 

CONFESIÓN DE FE:

AL NO TENER EL ENFOQUE CORRECTO EN LA BUSQUEDA DEL SEÑOR, SE QUE PIERDO TODOS LOS BENEFICIOS QUE ÉL PROMETE A QUIENES LE BUSCAN CON HAMBRE Y SED, ASÍ QUE LO PONDRÉ POR OFICIO Y PRIORIDAD PRINCIPAL DE MI VIDA, ENTONCES EL GOZO DE ÉL ME INUNDARÁ PERMANENTEMENTE.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Olam, Dios Eterno y Rey del Universo (Génesis 21:22). Mi amado Señor Jesús, Tú has hecho el tiempo, la eternidad y el universo, eres el Alfa y la Omega, no tienes principio ni final y así, mi Dios y mi Rey, quiero que sea mi hambre y mi sed por tu búsqueda, manteniendo el enfoque correcto para conocer más de Ti, que nunca acaben ni mermen, sino por el contrario cada día tenga más necesidad de tu Presencia en mi vida, de manera que el gozo, el contentamiento, las bienaventuranzas y la esperanza sean manifiestos permanentemente en ella como beneficios. Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo por permitirme entrar en tu Presencia en cualquier momento, y por la seguridad que me das de que allí estarás siempre dispuesto; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.

          

lunes, 27 de mayo de 2019

DESARROLLANDO PACIENCIA

 

SANTIAGO 1:2-4 Hermanos míos, alégrense cuando tengan que enfrentar diversas dificultades. Ustedes ya saben que así se pone a prueba su fe, y eso los hará más pacientes. Ahora bien, la paciencia debe alcanzar la meta de hacerlos completamente maduros y mantenerlos sin defecto. (PDT)

 

Del desarrollo de la paciencia para estar firmes y alcanzar las promesas de Dios.

Cuando las personas me dicen que están orando por paciencia, muchas veces les pregunto qué más están haciendo para tener un corazón tranquilo y apacible. La paciencia no es algo que los creyentes reciban, es un atributo esencial para alcanzar lo mejor de Dios y que desarrollan con el tiempo y la experiencia.

 

Pensemos en la paciencia como un músculo que tenemos que utilizar para verlo desarrollado. Para ello, los creyentes debemos reconocer la dificultad como una oportunidad para fortalecer la paciencia. El instinto humano es clamar a Dios cuando la tribulación toca nuestra puerta. Le echamos la culpa a otros, nos resistimos, nos quejamos, pero no decimos:

"¡Gracias Señor, es hora de aprender a ser más paciente!".

Las personas no estamos acostumbradas a pensar de esa manera, pero según la Biblia, así es cómo debemos hacerlo.

 

El libro de Santiago nos dice que consideremos las pruebas como un motivo de gozo (Vs.2). Desde el punto de vista humano, alabar al Señor por las tribulaciones es anormal. Sin embargo, hacerlo comienza a tener sentido para los cristianos cuando nos aferramos a la promesa de Dios de que todas las cosas son para nuestro bien (Romanos 8:28). No estamos esperando en el Señor en vano, podemos alabarle por la solución que dará, por las vidas que cambiará o por el fruto espiritual que desarrollará en nuestra vida. Aceptar las adversidades como un medio de crecimiento es un concepto radical en este mundo; y más aún lo es para el seguidor que alaba al Señor por la tormenta. Pero, además, los seguidores del Señor tenemos motivos para regocijarnos.

 

La tribulación aumenta nuestra paciencia, para que podamos mantenernos firmes en las promesas de Dios y esperar su momento perfecto.

 

CONFESIÓN DE FE:

ESTOY PLENAMENTE CONVENCIDO QUE LAS TRIBULACIONES NOS AYUDAN A DESARROLLAR NUESTRA PACIENCIA, PARA QUE PODAMOS MANTENERNOS FIRMES, ASÍ QUE, COMO SEGUIDOR DE CRISTO ME ALEGRARÉ EN LA DIFICULTAD Y ESPERARÉ EL MOMENTO PERFECTO DE DIOS PARA DISFRUTAR SUS PROMESAS.

 

ORACIÓN:

Dios Todopoderoso, Elohim Mauzi, Dios de mi Fortaleza (Salmo 27:1). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, Tú eres El Fuerte, y deseas hacernos fuertes, a los que en ti creemos y en ti esperamos, así que cuando nos damos cuenta de que somos débiles, Tú puedes hacernos fuertes. Es por eso por lo que me dispongo hoy para que me ayudes a desarrollar esa fortaleza para mi vida que es la paciencia, ese fruto de mi espíritu, que, en medio de la tribulación o dificultad, pueda yo decir que soy fuerte en Ti, y mantenerme firme como un verdadero seguidor tuyo. Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo por ayudarme a ser radical en los conceptos y convicciones que traen crecimiento a mi vida, tanto física como espiritualmente; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.

         

domingo, 26 de mayo de 2019

JUZGANDO A MI PAREJA

 

¡¡¡Desista de cuestionar los errores de su pareja y cambie usted!!!

 

MATEO 7:3-5

¿Y por qué te preocupas por la astilla en el ojo de tu amigo, cuando tú tienes un tronco en el tuyo? ¿Cómo puedes pensar en decirle a tu amigo: "Déjame ayudarte a sacar la astilla de tu ojo",

cuando tú no puedes ver más allá del tronco que está en tu propio ojo?

¡Hipócrita! Primero quita el tronco de tu ojo;

después verás lo suficientemente bien para ocuparte de la astilla en el ojo de tu amigo.

(NTV)

 

¿Se ha encontrado alguna vez cuestionando a su cónyuge por errores que, con el tiempo, descubre que usted mismo tiene?

 

"Mi marido siempre se queja de que soy incumplida, que llego tarde; pero él mismo me ha dejado muchas veces esperándolo para cenar", se quejaba una joven que pidió consejería.

 

En su criterio, lo más doloroso era la sucesión de críticas que recibía de su cónyuge:

"Generalmente no me dice palabras alentadoras", decía.

 

El mayor error en el que incurrimos es criticar de manera inmisericorde a la persona que Dios nos concedió como pareja, olvidando que nosotros mismos fallamos y no una sino muchas veces.

 

El pastor, escritor y conferencista cristiano, especializado en temas de matrimonio, Gary Chapman, escribe en su libro "Los 5 Lenguajes del Amor":

Como consejero matrimonial he llegado a la conclusión de que cada miembro de la pareja desea que su cónyuge cambie. El resultado:

 

¡¡¡Ambos se sienten condenados y con resentimiento en el corazón!!!

 

Pareciera que con más frecuencia de lo que imaginamos estamos ocupados en señalar a nuestro cónyuge e hijos, que en identificar los errores propios.

 

Nuestro Señor y Salvador Jesucristo, compartió una enseñanza que aplica a nuestras relaciones interpersonales y en el ámbito familiar, que la podemos encontrar en el pasaje que estudiamos hoy (Mateo 7:3-5).

 

EL PROCESO PARA SEGUIR:

 

1.   Lo que debemos es hacer un alto en el camino, identificar cuáles son nuestros errores y determinar en qué podemos cambiar.

2.   Es un proceso que comienza cuando reconocemos que no somos perfectos.

3.   Se afianza cuando le confesamos nuestras fallas a la pareja y cuando le anunciamos la disposición de cambio.

4.   Y reafirmamos ese compromiso con hechos concretos, que demuestren el amor que le tenemos como cónyuge, y también a nuestros hijos.

 

CONCLUYAMOS:

Nunca es tarde para que cambiemos y menos para evitar que nuestro hogar camine al despeñadero.

La decisión de cambio es el primer paso y se afianza cuando nuestras acciones evidencian esa voluntad de ser diferentes, en la forma de pensar y de actuar.

 

¡¡¡Hoy es el día para comenzar!!!

 

Si no ha recibido a Jesús como Señor y Salvador, hoy es el día para que lo haga, le aseguro que no se arrepentirá, porque prendidos de la mano del Señor Jesús emprendemos el proceso de cambio que siempre hemos anhelado.

 

REFLEXIONEN:

¿Se ha encontrado alguna vez cuestionando a su cónyuge por errores que, con el tiempo, descubre que usted mismo tiene?

¿Se ha tomado el tiempo suficiente para evaluar cuáles de sus acciones generan heridas emocionales a su familia?

¿Le embarga todavía el orgullo que lo lleva a creer que es infalible?

¿Qué aprendió de la enseñanza del Señor Jesús respecto a no andar señalando a otras personas, comenzando por los miembros de su familia (Mateo 7:3-5)?

 

Una meta hoy es pedirle a Dios la sabiduría necesaria para disponernos a cambiar y mantenernos en esa misma dirección.

 

MATEO 7:1,2

No juzguen a los demás, y no serán juzgados.

Pues serán tratados de la misma forma en que traten a los demás.

El criterio que usen para juzgar a otros es el criterio con el que se les juzgará a ustedes.

(NTV)

 

¡¡¡Así es como funciona!!!

Tu matrimonio y tu familia son el tesoro más valioso que Dios te ha dado

¡¡¡CUÍDALO!!!

 

Un Abrazo, Dios te bendiga y te guarde, haga resplandecer su rostro sobre ti,

y tenga de ti misericordia; y permita que prosperes en todas las áreas de tu vida,

y derrame sobre ti muchas bendiciones de Vida, Paz, Amor, Salud

y mucha Prosperidad


Juan Manuel Lamus O.

         

sábado, 25 de mayo de 2019

DESARROLLANDO EL SER INTERIOR

¡¡¡Descuidar el ser interior es descuidar el propósito de Dios en nosotros!!!

 

Si trabajamos duro en nuestro empleo, nos ganaremos el sostén; si trabajamos duro en nosotros mismos, podemos hacer una fortuna. (Jim Rohn)

Si no hay cimas y valles en nuestra vida, eso significa que estamos muertos. (Anónimo)

¿Podrá haber algo más triste que un trabajo no terminado? Sí, un trabajo nunca comenzado. (Christina Rossetti)

El ciclón deriva sus poderes desde un centro calmado; así también una persona.

(Norman Vincent Peale)

Necesitamos estar dispuestos a soltar la vida que hemos planeado para abrazar la vida que nos aguarda. (Joseph Campbell)

Nunca seremos la persona que podemos ser si la presión, la tensión y la disciplina son retiradas de nuestra vida. (James G. Bilkey)

Tal vez nunca sepamos qué resultados salieron de nuestra acción; pero si no hacemos nada, no habrá resultado alguno. (Mahatma Gandhi)

El pesimista se queja de la dirección del viento; el optimista espera que cambie; el realista ajusta las velas. (William Arthur Ward)

Estamos confinados tan sólo por los muros que nosotros mismos construimos.

(Autor Desconocido)

No hay mejor ejercicio para nuestro corazón que agacharnos y ayudar a otro a levantarse. (Bernard Meltzer)

Cuando la culpa levanta su fea cabeza, confrontémosla, discutámosla y dejémosla ir. El pasado ya pasó; perdonémoslo y sigamos adelante. (Bernie S. Siegel)

Podemos vivir toda una vida y, al final, conocer más sobre otras personas que sobre nosotros mismos. (Beryl Markham)

Veamos al cambio como una constante en nuestras vidas; démosle la bienvenida, esperémoslo, anticipémoslo. (Denis Waitley)

El arte de ser feliz yace en el poder de extraer felicidad de las cosas comunes.

(Henry Ward Beecher)

El fondo se convirtió en el sólido fundamento sobre el cual reconstruí mi vida.

(J.K. Rowling)

 

Si dejamos de trabajar lo que la Biblia llama el "Ser Interior", perderemos de vista la hermosura contenida en la expresión "a imagen y semejanza de Dios".

 

¡¡¡Perdemos mucho tiempo cuidando el exterior e ignorando la vida interna!!!

 

2 CORINTIOS 4:15,16

Todo esto es para el bien de ustedes. Así, cuantos más participen del favor de Dios, tanto más crecerá la acción de gracias para Gloria de Dios. Esta es la razón por la que nunca nos desanimamos. Aunque nuestro cuerpo mortal se va desmoronando, nuestro ser interior va recibiendo día tras día nueva vida. (BLPH)

 

Un Abrazo, Dios te bendiga y te guarde, haga resplandecer su rostro sobre ti,

y tenga de ti misericordia; y permita que prosperes en todas las áreas de tu vida,

y derrame sobre ti muchas bendiciones de Vida, Paz, Amor, Salud

y mucha Prosperidad


Juan Manuel Lamus O.

        

viernes, 24 de mayo de 2019

PACIENTEMENTE

 

SALMO 40:1 Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. (RV60)

SALMO 37:3-5 Confía en el Señor y haz el bien. Habita en la tierra y apaciéntate de la fidelidad. Deléitate en el Señor y Él te concederá los anhelos de tu corazón. Encomienda al Señor tu camino; confía en Él, y Él hará. (RVA'15)

 

Aprendamos a esperar en el Señor, pacientemente. El Señor dice:

"Te guiaré por el mejor sendero para tu vida; te aconsejaré y velaré por ti". (Salmo 32:8)

Practicar la paciencia es una tarea difícil. Esto es especialmente cierto cuando esperamos en el Señor, quien tiene su propio calendario.

 

Pero los creyentes que confían en que Dios cumplirá sus promesas, son recompensados generosamente con el deseo de sus corazones:


1.   La disposición de esperar revela el valor de lo que la persona desea.

Imaginemos, por ejemplo, que una joven anhela tener un esposo. Ella debe decidir si dar más importancia a casarse, o esperar con paciencia el compañero elegido por Dios. Si su prioridad es lo primero, podrá aceptar una oferta que es menos de lo que el Señor tenía para ella. El hombre pudiera ser un buen creyente, pero no el adecuado para esta joven específica.


2.   Nadie termina mal si espera que el Señor envíe lo mejor de Él en su tiempo perfecto.

Por supuesto, los creyentes no reciben todo lo que piden. A veces, Dios simplemente dice que no. En otros casos, ajusta nuestros deseos a los suyos. Por nuestra condición humana, no podemos conocer todos los detalles de una situación, por lo tanto, pedimos lo que pensamos que necesitamos, con base en nuestra limitada información.


3.   Un corazón sumiso acepta la dirección del Padre Celestial.

Cuando el esperado objeto del deseo llega, es posible que no se parezca a lo que el creyente pidió en un principio, pero será exactamente lo que necesita.

 

Esperar pacientemente en el Señor es un testimonio maravilloso, pues cuando Él responde, otros ven la realidad de Dios, su fidelidad y el acierto de nuestra confianza. Además, nuestra propia fe se fortalece. 

 

¡¡¡La paciencia es un atributo esencial para experimentar lo mejor de Dios!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

LOS NECIOS SE APRESURAN PARA AGARRAR SU PAGO, PERO LOS CREYENTES SABIOS SABEN QUE LA BENDICIÓN VENDRÁ EN EL TIEMPO ACERTADO, ADECUADO Y PERFECTO DE DIOS, PUES ÉL SIEMPRE CUMPLE LO QUE PROMETE.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Rahee, el Dios que ve (Génesis 16:13). Mi amado Dios y Señor Jesucristo, el Todopoderoso que ve y conoce todo, hoy clamo a Ti, Dios lleno de sabiduría, para que me ayudes a poder, sin condiciones ni dudas, adaptarme a tu calendario y aceptar tus tiempos, con la seguridad y la convicción de que Tú sabes que es lo mejor para mí y cuál es el momento adecuado y perfecto para recibir las promesas que me has hecho. Estoy dispuesto a esperar pacientemente, seguro de que todo saldrá bien, de acuerdo con tu buena, agradable y perfecta voluntad; por eso tendré un corazón sumiso a tu dirección. Gracias Espíritu Santo por tu guía e instrucción permanentes para mi vida. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!


Juan Manuel Lamus O.