PODER ESPIRITUAL
LUCAS 24:44-49 (NTV)
Entonces dijo:
- Cuando estaba con ustedes antes, les dije que tenía que cumplirse todo lo escrito acerca de Mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los Salmos.
Entonces les abrió la mente para que entendieran las Escrituras, y dijo:
- Efectivamente, se escribió hace mucho tiempo que el Mesías debería sufrir, morir y resucitar al tercer día. También se escribió que este mensaje se proclamaría con la autoridad de su Nombre a todas las naciones, comenzando con Jerusalén: "Hay perdón de pecados para todos los que se arrepientan". Ustedes son testigos de todas estas cosas. Ahora enviaré al Espíritu Santo, tal como prometió mi Padre; pero quédense aquí en la ciudad hasta que el Espíritu Santo venga y los llene con poder del Cielo.
♥ El relevante y poderoso Ministerio del Espíritu Santo, da a los verdaderos seguidores de Jesucristo poder espiritual para ejercer con denuedo el llamado desde esa nueva vida que también Él obra en nosotros.
La salvación se produce cuando ponemos la fe en Jesucristo como nuestro Salvador; Él nos perdona, nos transforma y nos ve como justos. En ese momento, somos redimidos, y aunque seguimos luchando con el pecado, éste es un enemigo derrotado. Luego, a medida que pasa el tiempo, nuestro servicio, nuestros dones y el amor al Señor deben, naturalmente, ser mayores. Lamentablemente, muchos cristianos que van a la iglesia cada semana, sirven sin pasión y dejan de crecer.
☝🏼 ¿Cómo es posible tal cosa?
Desgraciadamente, muchos creyentes, inclusive cristianos, no están conscientes del Ministerio del Espíritu Santo de Dios; de ahí la importancia de entender que:
1. El Espíritu Santo es un Miembro de la Trinidad. Al igual que Dios Padre y Dios Hijo. El primer capítulo de la Biblia nos dice que Él ya era desde antes de la formación de la Tierra y que participó en la creación (Génesis 1:2 y 26). Hoy, Él tiene el papel fundamental de ayudar, consolar y aconsejar a todos los creyentes.
2. El Espíritu Santo es un Regalo para cada hijo de Dios. Su Presencia en nosotros no es algo que tenemos que ganar o conquistar. Más bien, es un maravilloso privilegio; por morar en nuestro corazón, Él puede guiar y fortalecer, mantener alejado al creyente del peligro y conducirlo a la verdad (Juan 16:7,8).
3. El Espíritu Santo es la Vida Plena y Abundante. La Biblia nos dice que Jesús vino para que pudiéramos tener una vida plena y abundante (Juan 10:10 NTV). Esto solo es posible cuando escuchamos su Espíritu y obedecemos.
☝🏼 ¿Está usted teniendo la vida nueva, plena y abundante que Jesús prometió?
Él no estaba hablando de circunstancias felices, sino más bien del gozo y el contentamiento que son posibles por medio de una relación con Él; así que si usted tiene falta de esto, piense en cómo concibe al Espíritu Santo y ore por su dirección.
¡¡¡El Espíritu Santo nos da poder espiritual para que vivamos
de tal forma que nuestras nuevas vidas agraden a Dios, y también
los dones que nos ayudan a alcanzar el propósito para el cual fuimos creados!!!
♥ Entonces, nunca olvide que el Espíritu Santo no es simplemente el poder impersonal o la energía de Dios; Él es verdaderamente Dios, un Ser personal Divino; y el Señor Jesús lo describió como nuestro Ayudador, Consolador y Consejero.
CONFESIÓN DE FE:
ESTOY CONVENCIDO Y APERCIBIDO DEL PODEROSO MINISTERIO DEL ESPÍRITU SANTO, PUES SÉ QUE ME GUÍA, DIRIGE, CUIDA, PROTEGE Y REDARGUYE, PARA CONOCER LA VERDAD Y PODER TENER ESA VIDA NUEVA, PLENA Y ABUNDANTE QUE JESÚS ME PROMETIÓ.
ORACIÓN:
Espíritu Santo de Dios, Elohim Chaiyim, Dios Viviente (Jeremías 10:10). Amada Santísima Trinidad, sé que ustedes, Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, son el Dios Viviente, Único y Verdadero; el que está vivo y eres el dador de vida; el que ha creado la vida y todo lo que vive; el que quiere dar vida nueva, eterna, plena y abundante. Gracias quiero darte hoy, Espíritu Santo, por llevarme a comprender toda la verdad acerca de tu Ministerio, por medio del cual he sido empoderado para agradar a Dios Padre, servirle efectivamente y, de paso, poder sentirme seguro, cuidado, protegido y, sobre todo, bien dirigido hacia la vida plena y abundante que Jesús me prometió, y que puedo hoy vivir a través tuyo. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús y la revelación de su Santo Espíritu ¡Amén!
Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri
