TESTIGOS
HECHOS 1:6-8 Así que mientras los apóstoles estaban con Jesús, le preguntaron con insistencia: Señor, ¿ha llegado ya el tiempo de que liberes a Israel y restaures nuestro reino? Él les contestó:
- Sólo el Padre tiene la autoridad para fijar esas fechas y tiempos, y a ustedes no les corresponde saberlo; pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes; y serán mis testigos, y le hablarán a la gente acerca de mí en todas partes: en Jerusalén, por toda Judea, en Samaria y hasta los lugares más lejanos de la tierra. (N.T.V.)
© De cómo confrontar el mal de una forma deliberada, consciente y planificada.
Nuestro testimonio a cerca del trabajo de Dios en nuestra vida, impactara la de otros.
Todos los cristianos fuimos dejados como testigos de Jesucristo, así que debemos ejercer nuestra tarea, con responsabilidad y diligencia.
Uno de los mayores problemas de la iglesia actual, es que muchos cristianos no se ven a sí mismos como servidores del Señor. La voluntad de Dios no es simplemente que vengan a la iglesia a escuchar sermones, Él quiere, además, que salgamos para ser testigos de Cristo dondequiera que estemos o donde Él nos envíe. Los roles y los métodos mediante los cuales llevemos nuestro testimonio serán diferentes, pero cada creyente tiene un papel importante que cumplir. Personalmente, es posible que usted sienta que el efecto de sus esfuerzos es poco, pero el Señor puede hacer maravillas por medio de un servidor dispuesto. Nadie es inútil para Dios, Él se especializa en tomar a personas destruidas y dejarlas como nuevas para que sean de testimonio. Nadie llega a una edad en la que deja de ser útil, Dios todavía tiene trabajo para usted y cada uno de nosotros, los que hemos sido restaurados por su mano amorosa.
La pregunta no es si somos adecuados para ser sus testigos, sino si estamos dispuestos. Dios ha prometido el poder del Espíritu Santo para llevar a cabo sus propósitos por medio de nosotros, pero si no utilizamos su Divino Poder, desperdiciamos las oportunidades de impactar vidas. Las responsabilidades terrenales saben cómo robarnos la atención y limitar nuestra obediencia al Señor, no obstante, nada en la vida es más importante que hacer la voluntad del Padre Celestial.
© ¿Los asuntos de este mundo le han impedido hablar a otros de su Salvador?
La salvación y restauración no es solo una experiencia para disfrutar; es también un regalo para compartir. Usted no necesita tener un título de teología, simplemente diga lo que Jesús ha hecho por, para y en usted, y el Espíritu Santo hará el resto.
CONFESIÓN DE FE:
DIOS NO LLAMA A LOS CAPACITADOS, EL CAPACITA A LOS LLAMADOS; ASÍ QUE YO ESTARÉ DISPUESTO A SER SU TESTIGO DE UNA MANERA DELIBERADA, CONSCIENTE Y PLANIFICADA; SEGURO DE QUE EL ESPÍRITU SANTO ESTÁ CONMIGO Y DIOS ME HA CAPACITADO.
ORACIÓN:
Padre Celestial, Jehová Rohi, El Señor es mi Pastor (Salmo 23:1). Tu eres ese Dios que nos protege, provee, guía, dirige y nos capacita además de cuidarnos pacientemente. Hoy clamo a Ti por dirección y capacitación para estar siempre dispuesto y bien preparado, para ser testigo tuyo y llevar el mensaje de las buenas nuevas adonde sea que Tú quieras. Espíritu Santo de Dios te pido Tu Presencia permanente y Tu apoyo en tan honrosa labor a la que he sido llamado y de antemano te agradezco por el amor, la sabiduría y el conocimiento que me has dado. Amén.
Juan Manuel Lamus O.