SOLIDARIDAD
MATEO 9:35-38 Jesús recorrió todas las ciudades y aldeas de esa región, enseñando en las sinagogas y anunciando la Buena Noticia acerca del Reino; y sanaba toda clase de enfermedades y dolencias. Cuando vio a las multitudes, les tuvo compasión, porque estaban confundidas y desamparadas, como ovejas sin pastor. A sus discípulos les dijo:
- La cosecha es grande, pero los obreros son pocos. Así que oren al Señor que está a cargo de la cosecha; pídanle que envíe más obreros a sus campos. (NTV)
♥ Solidaridad, Paz y Compasión son valores, como joyas, que necesitamos hoy recuperar en nuestra sociedad.
♥ Esta es una historia real de solidaridad y paz, valores que son como una nueva luz:
Los Markovitz era una de las pocas familias judías que vivían en un apacible suburbio de Pensilvania, cuyas calles se llenaban de luces navideñas en diciembre. Ellos en cambio, colocaban una menorá (Candelabro judío de nueve brazos) encendida en una ventana de su casa como recordatorio de que también era el inicio de la Hanuka, una de sus principales fiestas religiosas.
Un día, a eso de las 5 de la mañana Judy Markovitz se despertó al oír un fuerte ruido. Habían roto la ventana y arrancado la menorá. Para los Markovitz fue una agresión que removió viejas heridas, ya que los padres de Judy habían estado en el pasado recluidos en un campo de concentración durante la segunda guerra mundial. Los Markovitz luego de recuperarse emocionalmente repararon la ventana y, al terminar la reparación, salieron a visitar al hermano de Judy, sin saber que sus vecinos se disponían a reparar algo más. En la noche, cuando la familia Markovitz regresaba a su casa, un extraordinario espectáculo los sorprendió al doblar la calle: Casi todas las casas de la manzana estaban adornadas con una menorá resplandeciente. La hija de la pareja, Vicky, hoy día de 18 años, recuerda aquellas ventanas iluminadas como una señal de compasión, solidaridad y paz. Ella comentó:
- "Fue como si todos los vecinos dijeran: Si vuelven a romper las ventanas de ellos, también tendrán que romper las nuestras".
CONFESIÓN DE FE:
REIRÉ CON EL QUE RÍE Y LLORARÉ CON EL QUE LLORA. PROCURARÉ NUNCA DARLE LA ESPALDA AL QUE SUFRE, PORQUE COMO VERDADERO SEGUIDOR DE CRISTO DEBO CULTIVAR LOS VALORES DE LA SOLIDARIDAD, LA COMPASIÓN Y PROCURAR LA PAZ ENTRE TODOS.
ORACIÓN:
Padre Santo, El Rachum, Dios de Compasión (Deuteronomio 4:31). Mi Dios y mi Señor Jesucristo, sé que tu naturaleza es de solidaridad, y en tu corazón estás lleno de compasión y sentimiento por tu pueblo y, por si fuera poco, estás completamente libre de crueldad o mezquindad, para que tu paz inunde los corazones de los que en Ti creemos y confiamos. Por eso hoy te pido que me des la sabiduría y la fortaleza necesarias para ayudar a mis hermanos en la solución de sus problemas y la búsqueda de las oportunidades y los propósitos que Tú tienes para la vida de cada uno de nosotros; que tu luz me ilumine permanentemente en este sentido para que los valores de la solidaridad, la compasión y la paz fluyan naturalmente de tu corazón al mío y del mío hacia los que sufren. He orado en el Poderoso Nombre de Jesús. Amén.