LA SOBERANÍA
ROMANOS 8:28-30 Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que Él tiene para ellos. Pues Dios conoció a los suyos de antemano y los eligió para que llegaran a ser como su Hijo, a fin de que su Hijo fuera el hijo mayor de muchos hermanos. Después de haberlos elegido, Dios los llamó para que se acercaran a Él; y una vez que los llamó, los puso en la relación correcta con Él; y luego de ponerlos en la relación correcta con Él, les dio su gloria. (NTV)
♥ La Soberanía de Dios, es la razón de nuestra seguridad.
Desde la eternidad pasada y a lo largo de la historia, Dios Todopoderoso, El Shaddai, ha gobernado con autoridad suprema. Nada está oculto de su conocimiento o más allá del alcance de su control.
Por causa de su Soberanía, nosotros, por la fe en Cristo, somos parte de su familia y podemos vivir con la seguridad de que:
1. Dios obra para nuestro bien.La Biblia declara que Dios tiene el poder de hacer que, a sus ojos, todas las circunstancias de nuestra vida obren para nuestro bien. Él tiene el conocimiento, el poder y el deseo para lograrlo. Dios promete hacer esto por aquellos que ama y pertenecen a Él. (Vs.28)
2. Dios nos protege cada día.La Biblia dice que "el Ángel del Señor acampa en torno a los que le temen" (Salmo 34:7 NVI). Sin el permiso de su voluntad, nada puede tocar a los hijos de Dios. Cuando nuestro Padre Celestial permite que sucedan cosas dolorosas, debemos confiar en su naturaleza inmutable y en sus promesas imperecederas (Santiago 1:17). Las personas y las circunstancias cambian, no así el tierno y bondadoso carácter del Señor.
3. Dios tiene el control sobre nuestro futuro.Él ha ideado todo un plan para el Cuerpo de Cristo, su Iglesia, y para cada uno de sus miembros, un plan tan magnífico más allá de lo imaginable (1 Corintios 2:9). Podemos confiar nuestro futuro a Dios porque su carácter y porque sus planes son perfectos. (Jeremías 29:11)
Descansar en la Soberanía del Señor nos hará libres del temor y la ansiedad. Si usted no tiene seguridad en cuanto a cualquiera de los puntos mencionados antes, confiese su falta de fe al Padre Celestial, pídale que le perdone y comprométase a meditar en su carácter y sus promesas.
CONFESIÓN DE FE:
RECONOZCO LA SOBERANÍA DE DIOS SOBRE MI VIDA, Y QUE TODO LO QUE HACE ES POR MI BIEN, CON LA INTENCIÓN DE PROTEGERME POR MEDIO DE SUS PRECEPTOS Y CUMPLIENDO TODAS SUS PROMESAS PARA PROCURARME UN BUEN FUTURO Y UNA ESPERANZA.
ORACIÓN:
Padre Celestial, El Emunah, el Dios Fiel (Deuteronomio 32:4). Dios y Señor nuestro, se que Tú eres completamente confiable, podemos confiar en tu Soberanía para esta vida y en nuestro destino eterno. Tú eres el único, mi Señor, que puedes prometernos un futuro y una esperanza, pues eres Dios que prometes y cumples, que nos proteges permanentemente y nos haces libres del temor y la ansiedad. Por eso hoy quiero darte gracias y de paso pedirte perdón por esos momentos de debilidad en los cuales pierdo mi confianza en Ti, hoy me comprometo a meditar en tu carácter inmutable y en tus maravillosas promesas para mi vida, y si yo alguna vez pierdo las esperanzas, ayúdame a recordar que tus planes son mejores que los míos. He orado en le Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!
