SÍMBOLOS
ROMANOS 6:3-8 No olviden que todos los que fuimos bautizados en Jesucristo nos unimos a Él en su muerte. Cuando fuimos bautizados, también fuimos enterrados con Cristo y así compartimos su muerte para que así como Cristo resucitó por el gran poder del Padre, nosotros también andemos de acuerdo a la nueva vida. Así que si fuimos unidos a Cristo en una muerte como la de Él, también nos uniremos con Él en su resurrección. Sabemos que nuestra vida de antes murió con Cristo en la cruz para que fuera destruido lo que desea pecar dentro de nosotros y dejáramos de ser esclavos del pecado. Un muerto está libre del poder del pecado. Como nosotros hemos muerto con Cristo, tenemos fe de que también viviremos con Él. (P.D.T.)
El Señor Jesús comisionó a sus seguidores a ir y hacer discípulos, "bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo" (Mateo 28:19). A medida que la iglesia primitiva difundía el mensaje del evangelio, la respuesta de fe del nuevo creyente era el bautismo. Significaba reconocer públicamente que la persona era ahora seguidora de Jesucristo.
El bautismo es un símbolo de nuestra experiencia de salvación. Mediante este acto, proclamamos la buena noticia de que Jesús murió por nuestros pecados, de que fue sepultado y resucitó; y damos testimonio de que hemos recibido su poderosa transformación. La palabra "bautizar" en la Biblia, es el mismo término que se usa en griego para describir a una tela que se sumerge en un tinte, se refiere a una transformación total. Por eso, al ser sumergidos en el agua, declaramos que estamos eligiendo morir a la vida vieja y nos estamos uniendo con Cristo. Nuestro pecado es sepultado con Él, y el poder del mismo es vencido por su muerte en la cruz (Romanos 6:14). Cuando somos levantados del agua, afirmamos la resurrección del Señor Jesús. El bautismo es una manera simbólica de decir que, así como el Señor venció a la muerte y resucitó, nosotros somos resucitados espiritualmente a una vida nueva. Somos "nacidos de nuevo" y transformados por el poder de su Santo Espíritu. En la Biblia, "creer" no es una palabra que indica aceptación intelectual, sino acción.
CONFESIÓN DE FE:
MI FE NUNCA DEBE SER OCULTADA COMO UNA LUZ PUESTA DEBAJO DE UN ALMUD (LUCAS 11:33); PUES SÉ QUE CUANDO NUESTROS FAMILIARES Y AMIGOS NO CREYENTES MIRAN NUESTRAS VIDAS, NECESITAN VER EL EVANGELIO EN ACCIÓN.
ORACIÓN:
Padre Celestial, El Chaiyai, Dios de mi Vida (Salmo 42:8). Mi amado Dios y Señor nuestro, eres la fuente de toda vida, nos das vida y vida nueva en Cristo Jesús, incluyendo la vida eterna. Por eso hoy vengo a tu Presencia con un corazón agradecido por la nueva vida que me has dado, por la transformación que, a través del modelo de vida de nuestro Señor Jesucristo, se ha gestado en mi. Gracias por tu Espíritu Santo que me guía y dirige en esa nueva vida, para que el bautismo no solo sea ese símbolo de muerte a la vieja vida y resurrección a la nueva que me has dado, sino también un testimonio para mi entorno de lo que Tú puedes hacer con una vida cuando en Ti creemos, este es el Poder de tu Evangelio. He orado en el poderoso nombre de Jesús. Amén.