NOS ADIESTRA

 

SALMO 18:32-36 (NTV) Dios me arma de fuerza y hace perfecto mi camino. Me hace andar tan seguro como un ciervo, para que pueda pararme en las alturas de las montañas. Entrena mis manos para la batalla; fortalece mi brazo para tensar un arco de bronce. Me has dado tu escudo de victoria. Tu mano derecha me sostiene; tu ayuda me ha engrandecido. Has trazado un camino ancho para mis pies a fin de evitar que resbalen.

 

♥ Dios es nuestro entrenador, es quien nos adiestra para la batalla, cuando tenemos que enfrentar los desafíos de la vida.

 

Para cualquier área de la vida en la cual queramos ser competentes debemos primero atravesar una etapa de preparación y entrenamiento. Nadie puede llegar a ser un profesional en el campo de la ciencia, los deportes, etc., sin primero tener que cursar varios años de estudios y adiestramiento. Generalmente la ineficacia de un profesional es causada por un previo deficiente entrenamiento.

 

☝🏼 En el mundo espiritual sucede lo mismo…

 

¡¡¡Si queremos salir victoriosos frente a los desafíos de la vida,

debemos primero ser adiestrados por Dios mismo; pues no es cuestión de

luchar por luchar, es necesario conocer nuestras armas, ser adiestrados

en su uso y, por cierto, también conocer las artimañas del enemigo!!!

 

Las estadísticas nos dicen que muchos cristianos hoy día tienen poco o nada de conocimiento y entrenamiento para entender que la guerra contra el diablo y sus demonios ya fue ganada por Cristo en la Cruz, pero que sin embargo, enfrentaremos muchos desafíos de su parte. Pareciera como que la iglesia entró en un letargo espiritual que le ha costado perder mucho terreno. La iglesia hoy día es vista por la sociedad como "un mal necesario" o como una "religión irrelevante", pero no como un lugar donde el Poder de Dios se manifiesta sobrenaturalmente. Lo increíble es saber que en realidad Dios capacitó a Su Iglesia, para ejercer Su autoridad sobre las fuerzas del mal en las ciudades y naciones. Una congregación bíblica y de acuerdo al sentir del Señor, es aquella que adiestra a sus miembros a batallar efectivamente contra las fuerzas espirituales de maldad. Esto por cierto no es fanatismo sino un principio espiritual, pues Dios nos ha diseñado para que seamos cristianos vencedores.

 

♥ ¿Está siendo usted adiestrado donde se congrega en la actualidad para batallar efectivamente contra las fuerzas del mal y enfrentar sus desafíos? Si no es así, piense bien y tome decisiones.

 

CONFESIÓN DE FE:

A TRAVÉS DE LA PALABRA DE DIOS Y EL PODER DEL ESPÍRITU SANTO, SOY ADIESTRADO PARA BATALLAR CONTRA LAS FUERZAS ESPIRITUALES DE MALDAD Y LOGRAR SER EFECTIVO AL ENFRENTAR LOS DESAFÍOS EN ESTA ÁREA ESPIRITUAL DE MI VIDA.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, Jehová Sabaot, el Señor de los Ejércitos (2 Samuel 5:10). Mi amado Dios y Señor, Jesucristo, sé que Tú eres el ser más poderoso y el más grande guerrero en el universo, Adonai Rey de reyes y General de Sus Ejércitos en el Cielo y en la Tierra, eres el Supremo comandante en jefe. Por eso hoy te doy gracias Señor, por recordarme que estoy metido en una guerra espiritual contra las fuerzas del mal, pero también que Tú quieres adiestrarme de manera efectiva para salir victorioso ante los desafíos que ellas me presentan, y por haberme sembrado en una congregación donde he sido enseñado y adiestrado, como lo enseña tu poderosa Palabra, la Biblia. Gracias Dios de los Ejércitos por ser mi entrenador en esta área de mi vida espiritual; he orado en el Poderoso Nombre de Jesús ¡Amén!

Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri