jueves, 26 de septiembre de 2024

BONDADOSO DIOS

 

SALMO 100:1-5 (NTV) ¡Aclamen con alegría al Señor, habitantes de toda la Tierra! Adoren al Señor con gozo. Vengan ante Él cantando con alegría. ¡Reconozcan que el Señor es Dios! Él nos hizo, y le pertenecemos; somos su pueblo, ovejas de su prado. Entren por sus puertas con acción de gracias; vayan a sus atrios con alabanza. Denle gracias y alaben su Nombre. Pues el Señor es bueno. Su amor inagotable permanece para siempre, y su fidelidad continúa de generación en generación.

 

Dios es bondadoso, por eso la vida confiando en Él es buena.

Todos conocemos personas que tienen problemas familiares, padecen enfermedades, reveses económicos, o algún otro tipo de problema.

☝🏼 ¿Cómo debemos responder a dichas situaciones en términos de lo que enseña la Biblia acerca de la bondad de Dios y de la expresión de su bondad para con nosotros?

 

Pues lo esencial es entender claramente estos dos aspectos de su bondad, veamos:

1.     En primer lugar, el carácter de Dios es perfecto, y todo lo que Él hace es recto (Deuteronomio 32:4). Él es misericordioso y clemente, grande en misericordia (Salmo 103:8). Por su misma naturaleza, Dios es bueno.

2.    En segundo lugar, nuestro Padre Celestial expresa su bondad basado en su propósito de conformarnos a la imagen de Cristo (Romanos 8:29). Desde la perspectiva del Señor, todo lo que encaja en su plan es provechoso para nosotros.

 

La mayor demostración de la bondad de Dios se ve en la vida y la muerte de su Hijo. Jesús dejó su hogar Celestial, tomó la forma de hombre, padeció y murió en lugar nuestro para que pudiéramos ser perdonados (Filipenses 2:6-8). Por lo que nuestro Salvador padeció, hemos sido adoptados en la familia de Dios, y el Cielo es nuestro hogar eterno. En el momento de la crucifixión de Cristo, los discípulos no podían ver nada beneficioso en ella, solamente sentían un gran pesar.

 

Pero nosotros sabemos que Dios dio a su propio Hijo para que podamos ser salvos (Romanos 8:32). Nuestra definición de la vida buena probablemente incluiría éxito material, buena salud y ausencia de problemas; las cosas que nos hacen felices ahora; pero nos es necesario comprender que:

 

¡¡¡Dios tiene una perspectiva eterna, y Él siempre obra

para llevar a cabo su plan a largo plazo para nosotros,

por eso podemos confiar en su bondad aun en tiempos de oscuridad!!!

 

CONFESIÓN DE FE:

SÉ QUE PUEDO CONFIAR EN DIOS CIEGAMENTE, Y POR ESO ESTOY PLENAMENTE CONVENCIDO DE QUE SU BONDAD Y SU MISERICORDIA ME SEGUIRÁN TODOS LOS DÍAS DE MI VIDA, Y ESOS DÍAS ACIAGOS NO SERÁN LA EXCEPCIÓN PARA EXPERIMENTAR SU AMOR EN ACCIÓN.

 

ORACIÓN:

Padre Celestial, El Olam, Dios Eterno (Génesis 21:33). Dios y Señor mío, Jesucristo, grande e infinito en misericordia, amor y bondad eres Tú, por eso tal vez me quede corto en agradecimiento por todo lo que has hecho en mi vida. De cualquier forma, sé que mi confianza puesta en Ti y tu carácter bondadoso, nunca será defraudada, pues tu misericordia es para siempre. Padre Celestial, hoy quiero apropiarme de tu promesa de adopción como hijo tuyo y heredero de tu Reino, lo que has provisto por medio de tu amado Hijo Jesucristo, pues yo lo creo, lo confieso y me hago partícipe de ello por fe, y de todos los beneficios de tu amor bondadoso en manifestación hacia mí. Gracias mi Señor y Salvador Jesucristo; he orado en tu Poderoso Nombre ¡Amén!


Pr. Juan Manuel Lamus Ogliastri